El primer ministro británico, Boris Johnson, evitó este lunes distanciarse de los comentarios racistas de su asesor Andrew Sabisky, al que acababa de contratar y que ha dimitido poco después por al presión del resto de partidos. En el pasado, Sabisky había afirmado que las personas negras tienen un coeficiente intelectual más bajo que el promedio de las blancas.
Durante un encuentro informativo con los medios este lunes, un portavoz del Gobierno se negó repetidamente a condenar los comentarios de Sabisky, quien, en varios artículos, ha llegado a defender el uso de la "anticoncepción forzada" para evitar la creación de una "subclase permanente".
Sabisky, de 27 años, ha afirmado que los estadounidenses negros tienen un coeficiente intelectual más bajo que el promedio que los blancos y tienen más probabilidades de tener una "discapacidad intelectual".
Además, en su perfil de la red social Twitter ha publicado comentarios misóginos y ha indicado que el deporte femenino "es más comparable a los Juegos Paralímpicos que a los de los hombres". El portavoz gubernamental evitó comentar estas afirmaciones o precisar si el primer ministro está de acuerdo con ellas.
"Los puntos de vista del primer ministro están bien publicitados y bien documentados", reiteró el portavoz en más de diez ocasiones, en las que fue preguntado qué pensaba Johnson sobre la inteligencia de las personas negras y la eugenesia, el estudio de métodos para criar selectivamente a seres humanos que mejoren la raza humana.
"RAROS CON TALENTO"
Sabisky trabajaba junto al influyente Dominic Cummings, el principal asesor de Johnson, después de que este anunciara en su blog, hace unas semanas, que el Gobierno buscaba contratar "raros con talento" para ser asesores en Downing Street.
El polémico Cummings fue, para muchos, el cerebro de la reciente remodelación de Gobierno llevada a cabo el pasado jueves, en que el "premier" decidió afianzar su control de ministerios clave como el de Economía al diseñar para él un grupo de asesores compartido con el de su despacho oficial, lo que forzó la dimisión de Sajid Javid, su antiguo titular.
La presión sobre Johnson para que despidiera a Sabisky había aumentado después de que el Partido Laborista, primero de la oposición, pidiera su relevo. El presidente de la formación socialdemócrata, Ian Lavery, calificó de "desagradable" que el Gobierno no hubiera condenado los comentarios de Sabisky y agregó que "ha respaldado la idea de que los blancos son más inteligentes que los negros". "Boris Johnson debería tener el coraje de hacer una declaración con sus propias palabras sobre por qué ha hecho este nombramiento, si lo respalda y cuáles son sus propios puntos de vista sobre el tema de la eugenesia", apuntó.
