Los 32 partidos ecologistas o verdes que existen en Europa se han federado en uno solo para presentarse juntos a las elecciones europeas del próximo junio. La decisión, definida como "histórica" por todos los participantes, ha sido tomada este fin de semana en Roma. El nombre elegido es Partido Verde Europeo.

La reunión terminará hoy al mediodía con la aprobación de una serie de resoluciones y el lanzamiento oficial del símbolo electoral: una estrella que sonríe. "Estamos construyendo la historia", dijo, eufórico, Daniel Cohn-Bendit, dirigente del Mayo francés (1968). "Este es un cambio histórico", declaró Maria Grazia Francescato, portavoz de los Verdes. Francescato explicó que la próxima campaña europea girará en torno a tres ideas: la paz, el medioambiente y los derechos humanos.

El manifiesto electoral verde para estas europeas afirma: "La Europa que queremos es abierta y tolerante, y defiende la diversidad tanto de la naturaleza como de los individuos". "Queremos --añade-- que la Unión Europea se distinga en la promoción de la paz, de la solidaridad, de la diversidad y de la igualdad en un mundo que se descubre a sí mismo cada vez más frágil y dividido".

LETONIA, EL PRIMER FEUDO Casi respondiendo a tantas buenas intenciones, el verde Joschka Fischer, ministro de Exteriores de Alemania, dijo durante la inauguración del congreso: "Es bello estar en la oposición, pero debemos intentar entrar en los gobiernos. Es bello tener un programa bonito y estar en el bando justo de la historia, pero ¿qué pasa si luego la historia se va por el camino equivocado?". Los verdes firmarán hoy su carta fundacional en un acto en el Ayuntamiento de Roma, en la colina sagrada del Capitolio.

Este congreso ha coincidido con el encargo de formar Gobierno en Letonia a Indulis Emsis, de la Unión de Verdes y Campesinos, que será el primer ecologista en presidir el Ejecutivo de un país europeo.