Los organismos israelíes de seguridad interceptaron ayer a una mujer palestina que llevaba colocado un chaleco explosivo de 25 kilos y amenazaba con detonarlo. Los hecho ocurrieron en el asentamiento de Ariel, en la parte norte de Cisjordania, uno de los dos únicos asentamientos judíos en los territorios ocupados con el estatus de ciudad.

La supuesta suicida procede de la localidad palestina de Luban Oriental, y aceptó deshacerse de unos 15 kilos de explosivos antes de ser detenida.

Los servicios israelíes ya advirtieron el pasado miércoles que no hay que descartar que las organizaciones armadas palestinas quieran responder con un atentado suicida la declaración presidencial que hizo Bush, que de forma indirecta reconoció el derecho de Israel a anexionarse algunos bloques de asentamientos en Cisjordania. Uno de esos bloques es precisamente el de Ariel, donde la suicida palestina fue detenida a última hora de la tarde.