Cerca de la mitad de los candidatos que se presentan a las elecciones a Consejos de Distrito que se celebran en Hong Kong este domingo pertenecen al movimiento prodemocrático, quienes consideran los comicios como un referéndum de facto contra la controvertida Jefa del Ejecutivo local, Carrie Lam.

La llamada a las urnas espera una respuesta masiva este domingo: pese a que formalmente sólo se eligen a los representantes de los Consejos de los 18 distritos hongkoneses, suponen la primera oportunidad para que los ciudadanos den su punto de vista sobre la situación en la urbe desde que estalló el movimiento de protesta el pasado junio.

Hasta el momento, 4,13 millones de personas se han registrado para votar -la población de la ciudad es de unos siete millones y medio de personas-, y se han presentado 1.090 candidatos que competirán por 452 escaños.

Aunque los cargos electos tendrán pocos poderes reales, ya que son sólo responsables de asuntos como la recogida de basuras o el funcionamiento de los semáforos, la elección tendrá un carácter simbólico, coinciden los expertos consultados por Efe.

"ESPECIE DE REFERÉNDUM"

"Las elecciones van a ser una especie de referéndum", comentó a Efe el politólogo Ma Ngok, de la Universidad China de Hong Kong, quien recuerda que normalmente estas elecciones de distrito "se centran únicamente en asuntos locales. Esta vez, la gente lo va a usar para expresar su postura política".

Así, se espera que los comicios emitan un veredicto sobre el desempeño de Lam al frente del Gobierno o sobre la presunta brutalidad de la policía durante sus enfrentamientos con los manifestantes.

No obstante, los votantes podrían también castigar a los 500 candidatos próximos al movimiento de protesta debido a la violencia empleada por los activistas más radicales en los últimos meses.

El movimiento espera ganar apoyos para sentar una base popular que le ayude en las elecciones del Consejo Legislativo que tendrán lugar en 2020, especialmente por parte de los jóvenes: según la Oficina Electoral, hay 392.601 nuevos votantes registrados este año, de los cuales 58.794 tienen entre 18 y 20 años.

ROMPER EL MONOPOLIO

En junio, cuando comenzaron las protestas, el movimiento prodemocrático logró sacar más de un millón de personas a la calle para protestar contra un polémico proyecto de ley de extradición -ya retirado por el Gobierno-, exigir una mejora de los mecanismos democrático y oponerse a la cada vez mayor injerencia de Pekín.

Aunque la popularidad de Lam ha caído en picado desde entonces, el académico Jacky Fung, del Instituto de Investigación Política de Hong Kong, opina que las recientes obstrucciones al tráfico vial y ferroviario provocadas por los manifestantes durante sus protestas podría costarle muchos votos al movimiento.

"Según las encuestas de opinión, sólo el 2 % de la gente está en contra de los manifestantes que atacan a la policía, pero el 20 % está en contra de que causen interrupciones en el metro. Los activistas han desafiado a las autoridades, pero subestimado el deseo de los hongkoneses de ir a trabajar", argumenta Fung a Efe.

Por su parte, Ma advierte de que algunos candidatos del movimiento prodemocrático apenas tienen experiencia política, y recuerda que en las anteriores elecciones distritales de 2015 la mayoría de los escaños fue a parar a los llamados "pro-Pekín".

"Muchos de los candidatos pro-Pekín son concejales de distrito desde hace mucho tiempo, mientras que los prodemócratas son novatos. Va a ser difícil que vayan a conseguir más de la mitad de los asientos. Mi pronóstico es 200 como máximo", añade.

Sin embargo, el académico cree que esta cifra es "más que suficiente" como para dar un impulso moral al movimiento, que en los últimos meses se ha visto perjudicado por el fuerte aumento de la violencia callejera.

EXAMEN DE CONCIENCIA

La última crisis desatada en Hong Kong a raíz de una huelga general ha derivado en graves enfrentamientos en campus como el de la Universidad Politécnica, donde decenas de jóvenes activistas permanecen encerrados y asediados por la policía.

Este episodio alimentó la incertidumbre de que las elecciones pudiesen cancelarse, y el Gobierno advirtió de que el lunes de que los incidentes "reducían" las posibilidades de celebrar los comicios, que "sólo tendrán lugar si no hay violencia en las calles".

Por ello, los internautas hongkoneses han pedido estos días a los manifestantes que se abstengan de salir a provocar altercados para evitar que los incidentes perjudiquen a los candidatos de los partidos prodemocráticos.

"Pekín no quiere que se cancelen las elecciones, quieren que se restablezca el orden y que sigan adelante. Cancelarlas podría dar a Occidente motivos para imponer sanciones a China y podría agregar más leña al fuego", agrega el politólogo Ma.

Por otra parte, Fung opina que las elecciones deberían servir para que la sociedad hongkonesa, más polarizada que nunca, reflexione, "entre ellos, los manifestantes, que deben hacer examen de conciencia sobre su estrategia".