“El movimiento islámico ha traído el caos a Europa. En Holanda queman vehículos, queman políticos, y existen zonas prohibidas”. Esta contundente y arriesgada afirmación le ha pasado factura, casi tres años después, a su autor. Se trata del nuevo embajador de Estados Unidos en los Países Bajos, Peter Hoekstra, quien pronunció estas palabras en el 2015 cuando era congresista para el partido Republicano en Michigan.

En su primera conferencia de prensa ante los medios nacionales, los periodistas cuestionaron al diplomático estadounidense y le pidieron que nombrara algún político que hubiera sido quemado. La situación fue incómoda y embarazosa para Hoekstra, quien no supo responder y se limitó a decir que no entraría “en este asunto”.

Presión de los periodistas

No conformes con esa respuesta, los reporteros quisieron insistir. El periodista de la televisión holandesa ‘RTL Nieuws’, Roel Geeraedts, presionó al embajador de Trump y volvió a preguntar. “Todo el mundo aquí se hace la misma pregunta: ¿vas a retirar o no la escandalosa afirmación que hiciste?” a lo que Hoekstra contestó con un simple “gracias”.

Sin embargo, los comunicadores no cedieron y el interrogatorio adoptó un tono más tenso. “¿Puede mencionar un solo ejemplo de un político holandés que haya sido quemado?”, “Tiene que responder” le exigían los periodistas. Pero el silencio y el rubor se apoderaron de Hoekstra.

Entre la espada y la pared

No es la primera vez que el republicano se encuentra en esta situación. El periodista Wouter Zwart ya lo puso entre la espada y la pared en diciembre, solo un mes después de que el Senado lo nombrara embajador del país europeo. En ese momento, el excongresista negó esa afirmación y dijo que se trataba de una noticia falsa.

La prensa holandesa ya se ha hecho eco de los acontecimientos. “Actuación embarazosa del controvertido embajador”, “el embajador Hoekstra, perdido en La Haya” o “Reunión incómoda entre el embajador y los periodistas” han sido algunos de los titulares de las principales cabeceras del país.

Hoekstra nació en Holanda y emigró con su familia hasta Michigan, donde ha ejercido como congresista en Michigan durante 15 años. El ahora embajador es conocido por sus ideas conservadoras y en el Congreso ha votado leyes para restringir los derechos de las mujeres y los homosexuales. Además, el republicano ha apoyado públicamente la pena de muerte y ha manifestado que los refugiados suponen una amenaza para la seguridad europea.