El enviado de la cadena Antena 3 Televisión a Haití Ricardo Ortega, de 37 años, murió ayer tiroteado en Puerto Príncipe, tras una manifestación de la oposición que fue atacada por los chimeres , seguidores radicales del expresidente Jean-Bertrand Aristide. Ricardo Ortega, natural de Denia (Alicante), falleció una hora después de ser ingresado en el hospital Canapé Vert, con un disparo en el tórax y otro en el abdomen, según fuentes médicas. Hubo cinco víctimas mortales más.

El tiroteo en el que resultó muerto el periodista tuvo lugar al término de una manifestación, en la que unos 10.000 opositores a Aristide pidieron el procesamiento de funcionarios del régimen depuesto. Al término de la marcha, en los alrededores del palacio presidencial, los chimeres dispararon contra los manifestantes, que empezaban a dispersarse. El ataque estuvo perfectamente coordinado: un grupo disparó desde lo alto del cine Capitol y otro grupo, desde una calle aledaña.

EN EL SUELO Malherido, Ortega quedó varios minutos tendido en la calle sin que nadie pudiera hacer nada por socorrerlo, puesto que los agresores seguían disparando contra el gentío. Cuando los atacantes huyeron, sin que los soldados franceses y la policía haitiana que vigilaban la manifestación pudieran detenerlos, varias personas y compañeros informadores recogieron al periodista español, que llegó al hospital con vida. Cuando los médicos se disponían a intervenirlo quirúrgicamente, falleció debido a la gravedad de las heridas y tras entrar en estado de shock .

Además de Ortega, hubo al menos otros cinco muertos y 26 heridos, entre ellos dos fotógrafos, uno de ellos estadounidense. Todos ellos fueron trasladados al hospital Canapé Vert, alrededor del cual se apostaron anoche los soldados franceses para garantizar la seguridad

GESTIONES CONSULARES La cónsul de España en Haití, Pilar Méndez, se personó en el hospital para realizar las diligencias formales para hacerse cargo del cadáver del periodista, que llegó hace unos días Haití para cubrir el conflicto del país caribeño. Fuentes diplomáticas avanzaron que iban a recomendar a la familia de Ortega la incineración del cadáver, dadas las dificultades existentes para la repatriación.

La manifestación de la oposición había transcurrido en calma. Tal y como habían pedido los convocantes, nadie iba armado. Los soldados franceses y la policía haitiana acompañaron la marcha, mientras que los marines se apostaron en algunos cruces para evitar la dispersión de los manifestantes.

En la manifestación participó el principal líder de los rebeldes haitianos, Guy Philippe, y Evans Paul, el exalcalde de Puerto Príncipe. Tras el nuevo estallido de violencia, Philippe, advirtió de que puede ordenar a sus hombres que vuelvan a empuñar las armas, ya que hace unos días anunció el desarme de los antiguos combatientes contra el presidente Aristide.