"Era difícil saber quién me pedía fotos", se defendió el diputado Juan Guaidó, reconocido por Estados Unidos y otros 54 Gobiernos como "presidente encargado" de Venezuela, después que se conocieran imágenes suyas en las que se ve abrazado con dos integrantes de Los Rastrojos, la banda paramilitar de Colombia que secuestra y trafica drogas y combustible en la frontera común.

El madurismo ha hecho una fiesta con esas fotografías. Diosdado Cabello, el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente y de hecho el segundo hombre fuerte de Venezuela, las ha hecho públicas en el programa televisivo "Con el mazo dando", emisión que utiliza para linchar a sus adversarios. "Eso es lo que ellos defienden", ha dicho Cabello.

Las "selfies" datan del 22 de febrero cuando Guaidó atravesó la frontera para participar de la fallida entrega de alimentos y medicinas desde Cúcuta así como el concierto organizado para apoyar la ayuda humanitaria. "No tengo conocimiento de lo que sucedía el día del paso del lado colombiano, pero sí tengo claro que atravesamos no menos de 11 bloqueos", trató de explicar el diputado.

Voluntad Popular, el partido al que pertenecen Guaidó y Leopoldo López, no solo expresa las posiciones más radicales de la oposición venezolana. También ha calificado al madurismo de sostén de la narcoguerrilla al comentar la reciente decisión de Iván Márquez, el negociador de la paz entre las FARC y el Gobierno de Juan Manuel Santos, de volver a la lucha armada porque Iván Duque, su sucesor, no cumple lo pactado en La Habana.

FOTOS "ANECDÓTICAS"

De golpe y porrazo, los venezolanos han visto al líder opositor junto con Jhon Jairo y Alberto Lobo, alias Brother, dos de los jefes de Los Rastrojos. "Usar esas fotos para tergiversar es hacerle el juego al régimen de (Nicolás) Maduro", ha señalado Guaidó. "En la frontera es el Ejército colombiano el que está haciendo una gran labor enfrentando a estos grupos. Nuestros aliados son el presidente Duque y (el ministro de Exteriores) Carlos Holmes Trujillo", ha insistido.

El diplomático Humberto Calderón Berti, quien representa a Guaidó en Bogotá, ha pedido no dar "mayor importancia" a esas fotos que ha calificado de "anecdóticas". Wilfredo Cañizares, representante de la Fundación Progresar en el departamento colombiano de Norte de Santander, ha puesto en entredicho el argumento de Guaidó: ha afirmado que su subrepticia entrada a ese país desde el Táchira venezolano fue coordinada por este grupo de extrema derecha y así lo hizo saber en ese mismo momento el senador Gustavo Petro, líder de la izquierda colombiana.

Las fotografías han añadido una cuota más de tensión al conflicto entre Caracas y Bogotá. El Palacio de Miraflores asegura que Duque siempre supo de esa polémica escena en la que se exhiben sonrientes el presidente encargado y los bandidos. La vicepresidenta Delcy Rodríguez ha anunciado que se presentarán esas pruebas ante la ONU porque violan la resolución 1373 del Consejo de Seguridad.