EL SINGULAR SISTEMA ELECTORAL DE ESTADOS UNIDOS Y LA EVENTUAL IMPUGNACION POR IRREGULARIDADES SI EL RESULTADO DEPENDE DE UN PUÑADO DE VOTOS PUEDEN DEJAR A LOS CIUDADANOS ESTADOUNIDENSES SIN CONOCER EL NOMBRE DE SU PRESIDENTE EL 2-N. LOS DOS ESCENARIOS SON:

Impugnaciones Varias irregularidades en todo el proceso electoral son impugnables por la vía judicial: inscripciones sospechosas en las listas electorales (los republicanos acusan a los demócratas de haber hinchado las listas electorales en algunos estados); acusaciones de intimidación o de impedimentos para votar; imposibilidad de contar los sufragios electrónicos en caso de dudas sobre la regularidad del escrutinio; retraso en el recuento de los votos por correo; y demora también en los llamados "votos por precaución" (los votos que se admiten pese a que existen dudas sobre la inscripción en las listas y que se recuentan cuando ya se ha verificado que todo es correcto).

El empate Los electores estadounidenses no eligen al presidente, sino que designan un Colegio Electoral que luego lo hará. El Colegio Electoral está formado por 538 votos electorales, repartidos entre los estados según su población. Y cada estado otorga todos sus votos electorales al candidato que más sufragios populares logre en ese territorio. Para ganar se necesitan como mínimo 270 votos electorales, pero puede darse el caso de que haya un empate a 269. Debería ser entonces la Cámara de Representantes quien decida el ganador de los comicios. En estas circunstancias, Bush tendría casi todas las posibilidades de ser reelegido, puesto que todo apunta a que los republicanos mantendrán su mayoría en esa Cámara.