Una persona murió y otras dos se encuentran hospitalizadas después de que un hombre las apuñalara ayer en una concurrida calle de la ciudad australiana de Melbourne. Estado Islámico (EI) reivindicó el ataque.

«El autor de la operación en Melbourne fue un combatiente del Estado Islámico, que realizó la acción en respuesta a los llamamientos (de Estado Islámico) de atacar los objetivos de los países de la coalición antiyihadista, liderados por Estados Unidos», afirmó el grupo yihadista en un comunicado.

La policía australiana había informado previamente de que consideraba el ataque como un acto terrorista, y había agregado que el sospechoso era de Somalia y era conocido por los servicios de inteligencia. «Ahora estamos tratando esto como un evento terrorista», manifestó Graham Ashton, jefe de la Policía Estatal de Victoria. El sospechoso era «conocido» por la policía y su vehículo 4x4 estaba lleno de bombonas de gas.

El portavoz de la Policía del estado de Victoria, cuya capital es Melbourne, confirmó en una rueda de prensa que disparó contra el supuesto atacante en el pecho y este falleció en el hospital. El supuesto atacante había salido de un vehículo en llamas después de que aparentemente lo hubiera estrellado contra un centro comercial de la concurrida calle de Bourke.

Después de abandonar el coche, el presunto autor del atentado arremetió con un cuchillo contra los allí presentes, uno de los cuales falleció en la céntrica calle Bourke, que ya fue escenario el 20 de enero del pasado año de un atropello deliberado en el que murieron seis personas, entre ellas un bebé y una niña de 10 años.