"La inversión en el deporte es la mejor inversión para el ser humano y especialmente para la juventud", ha asegurado el presidente boliviano Evo Morales, durante la entrega de premios a los ganadores de la carrera pedestre que se realizó en la ciudad de Sucre para conmemorar una fecha patria. Pero también, en cierta manera, parecía hablar de sí mismo. El club Sports Boys Warnes, de la primera división del fútbol de su país, anunció que quiere reforzar la plantilla con el mismísimo jefe de Estado. "¿No será mucho?", se preguntaron, atónitos, muchos compatriotas.

Morales, nacido en 1959, consumido por las obligaciones del manejo del Gobierno, podrá disfrutar esporádicamente de una pasión que arrastra desde su pobre niñez como es el juego del fútbol. Pero de allí a la profesionalidad hay un abismo que Mario Cronenbol, el presidente de Sports Boys, estaría dispuesto a atravesar. “Pisa bien la pelota y tiene buen disparo", lo definió el dirigente. Cronebol reconoció que el interés por contratar a Morales le daría lustre a su modestísima institución. El presidente jugaría entre 20 y 30 minutos por partido. "Es un tema de marketing, una empresa comprometió su apoyo si es que el presidente juega para el equipo. Todos estarán a la expectativa de que el presidente haga en el terreno de juego'', dijo. Como era de suponer, el número de su camiseta estaría asegurado de antemano. "Le asignaremos el número 10'', aseguró.

Morales hasta percibiría un salario de 214 dólares (1480 bolivianos) por vestir los colores de Sport Boys, que está por terminar se encuentra en el noveno puesto entre 12 equipos. Morales, como entre sus seguidores e, incluso, sus adversarios, no ha soltado palabra al respecto. Seguramente se siente alagado de que, a los 54 años, hayan pensado en sus habilidades como futbolista. Y que nada menos que un equipo de Sana Cruz, la región más adversa a la figura presidencial, se interesara en él. Según Cronembold, “será histórico que el presidente en ejercicio de un país juegue profesionalmente”. Por lo pronto, Morales tiene en su agenda otras obligaciones: ser reelecto en los comicios del 12 de octubre.