Fátima Imam es una abogada nigeriana nacida en la ciudad de Maiduguri, capital del estado de Borno, lugar donde hace 16 años nació Boko Haram, la organización terrorista que ha logrado extender sus tentáculos a los países del lago Chad: Níger, Camerún y el Chad. Una guerra que ha causado la muerte a al menos 25.000 personas, la gran mayoría civiles. Imam ha viajado a Barcelona invitada por Oxfam Intermón.

- ¿Cuáles son las principales razones que impulsaron el nacimiento de Boko Haram?

- Es muy difícil saberlo porque es difícil saber qué es realmente Boko Haram. No se sabe cuál es su objetivo ni por lo que está luchando, ni se entiende su extrema violencia. Ellos dicen que quieren instaurar un califato, pero van en contra de la propia población musulmana.

- Cuando nació, en el 2002, no hizo uso de las armas hasta años más tarde y se hablada de marginación, pobreza y discriminación de la población musulmana de Borno…

Yo soy musulmana y como musulmana no creo que Boko Haram luche por defender los derechos de los musulmanes, ni cuando se creó ni cuando se radicalizó más y tomó las armas en el 2009. Mata de manera indiscriminada, a musulmanes y a no musulmanes. Lo que hacen va en contra de las enseñanzas del islam. Empezó como grupo armado local, se extendió por el país y con el tiempo ha provocado que la crisis afecte a toda la región.

- Parece ser que ahora se ha debilitado ¿es así?

- Si, esta es la impresión, aunque todavía queda mucho por hacer. Del 2009 al 2013 eran fuertes y muy violentos. En Maiduguri te levantabas por la mañana y les veías armados en las calles. Entraban en la casas, mataban a la gente, a algunos los degollaban, y forzaban a las mujeres a casarse con ellos. Fue una época muy difícil, que costaba sobrevivir. Tenías que dormir con un ojo cerrado y el otro abierto, porque no tenías ni idea donde iba a producirse el próximo ataque. Convivías con gente que no sabías si al día siguiente iba a atacar tu casa. En esa época llegaron a controlar parte del estado, ahora ya no, pero la atmósfera es todavía tensa y la gente vive con miedo. Ahora es menos probable que ataquen tu casa pero llevan a cabo ataques suicidas en lugares públicos muy concurridos. Es estar en el lugar equivocado a la hora equivocada.

- ¿Cuál es la situación humanitaria en Borno?

- Sigue llegando mucha gente a Maiduguri que se une a los que llevan años en los campos de desplazados. En Borno tenemos todo tipo de campos: los formales, los informales y aquellos que se improvisan en las comunidades que acogen también a los que huyen de la guerra. Hay problemas de malnutrición, de enfermedades. Hay muchas zonas donde es muy difícil acceder y no llega la ayuda humanitaria. Las necesidades son abrumadoras. Necesitamos una ayuda masiva. Boko Haram es un grupo que está todavía activo y estamos en una zona de guerra.

- El secuestro de las niñas de Chibok hizo que el mundo conociera el problema. El Gobierno estima que desde que estalló el conflicto los terroristas han secuestrado a más de 9.000 mujeres y niñas…

- Nadie puede saber el número exacto. Si, el caso de la escuela de Chibok dio la vuelta al mundo, pero hay otras centenares de niñas que han sido secuestradas y ni el Gobierno ni los medios extranjeros les prestan atención. Nadie sabe nada de ellas.

- ¿Por qué las mujeres se han convertido en el principal blanco de Boko Haram?

- No creo que sean el principal objetivo, sino uno más. En su estrategia incluye también la eliminación sistemática de los hombres. Estas mujeres y niñas ven como matan primero a sus padres, a sus hermanos, a sus maridos, y lo hacen frente a ellas. También se llevan a los chicos jóvenes para que formen parte del grupo armado. En algunas comunidades solo quedan ancianos.

- ¿Pero en qué sentido las mujeres son utilizadas como arma de guerra?

- A muchas jóvenes y niñas las secuestran para casarlas con los hombres del grupo con el objetivo de que procreen y así incrementar el número de combatientes. Esos hijos crecen en ese entorno, impregnados de la ideología extremista, y de esta manera pretenden mantener activa la organización en el futuro. A otras las venden como esclavas o las utilizan como premio sexual para los combatientes. A estas no las casan, así pueden ser violadas varias veces por muchos hombres.

- ¿Y las niñas bomba?

- Son niñas de unos 9 años a las que cargan con un cinturón de explosivos y las hacen estallar en zonas donde hay mucha gente. A algunas les dicen que si no lo hacen matarán a sus padres, a sus hermanos. Utilizan a niñas que nunca han ido a una escuela y que ya han sido adoctrinadas y que no son conscientes de las consecuencias del acto que llevan a cabo.

- ¿Cómo es la vida de las secuestradas en manos de Boko Haram?

- Las que han estado con ellos han sufrido muchísimo y están completamente traumatizadas. A muchas le mataron a su marido antes y tuvieron que dejar a sus hijos atrás. Les han forzado a tener otro familia.

- ¿Y las que han logrado escapar, que les espera a su vuelta?

- Son estigmatizadas y discriminadas. La comunidad ya no confía en ellas y rechazan a sus hijos porque ahora llevan la sangre de Boko Haram y piensan que cuando crezcan serán como sus padres. Es terrible lo que sufren esas mujeres. Imagínate el trauma que supone haber estado secuestrada y después, cuando regresas a casa, sentirse totalmente señalada y discriminada. Las familias dicen: 'está bien, te acepto, pero no voy a aceptar a tus hijos'.

- Hay informes que denuncian también agresiones sexuales por parte de militares y policías en los campos de desplazados…

- Si, es cierto. En algunos casos son mujeres solas que no tienen con qué alimentar a sus hijos y son coercionadas a tener sexo a cambio de comida. Otras para que los vigilantes les permita moverse o salir de los campos, que está prohibido. Hay también, las que simplemente son violadas.

- La guerra en Nigeria y en la región del lago Chad es una de esos conflictos olvidados

- Si, lo es. Nigeria es un país muy rico en recursos naturales, pero está muy mal gestionado por los gobiernos y la pobreza afecta a millones de personas. La corrupción está profundamente extendida en la estructura del país y eso afecta a sectores claves del como la educación o la sanidad, a los que no llegan los recursos necesarios. Esa es una de las principales razones que contribuyen a que no se desarrolle y que el país se mantenga generación tras generación en un círculo del que no es posible nunca escapar.