El FBI enviará a agentes a Malasia para ayudar en la investigación de la desaparición del vuelo de Malaysia Airlines sobre aguas del Golfo de Tailandia, informó una fuente oficial estadounidense a la CNN.

El FBI participa en la investigación porque viajaban ciudadanos estadounidenses a bordo del vuelo MH370 (tres, según la aerolínea) y no descarta el terrorismo ni ninguna otra causa en relación con la desaparición del Boeing 777 que cubría la ruta entre Kuala Lumpur y Pekín.

Los servicios malasios de seguridad investigan la lista de pasajeros tras conocer que al menos dos de ellos viajaban con pasaportes falsos.

Ambos aparecen en imágenes de un circuito cerrado de televisión (CCTV) que han sido puestas a disposición de la investigación y de agencias antiterrorismo.

"Tenemos imágenes de CCTV de ellos desde la zona de registro hasta la de embarque y salidas", dijo en una rueda de prensa el director general del departamento malasio de Aviación Civil, Azharuddin Abdul Rahman.

Los pasaportes robados, unido a que el avión desapareció en una zona sin problemas meteorológicos, han alimentado las especulaciones sobre un posible ataque terrorista.

La investigación también se centra en determinar porqué el avión dio media vuelta antes de desaparecer, tal como recogieron los radares, según dijo el jefe de las Fuerzas Aéreas, el general Rodzali Daud.

"Intentamos encontrar un sentido (a la maniobra) que hemos podido corroborar en los radares (...). No obstante, no hubo ninguna señal o llamada de emergencia del piloto, lo que nos tiene igualmente intrigados", indicó Rodzali.

Tras corroborar la maniobra del avión las autoridades ampliaron la zona de búsqueda del aparato en aguas del Golfo de Tailandia en una operación en la que participan 22 aviones y 40 embarcaciones de Malasia, Vietnam, Singapur e Indonesia.

"La desaparición del MH370 no es algo que podamos tomarnos a la ligera y no podemos descartar ninguna posibilidad. Las agencias de inteligencia de países relevantes han sido informadas y compartiremos la información a medida que la investigación avance", dijo el ministro de Defensa y Transportes de Malasia, Hishammuddin Hussein.

Estados Unidos ha enviado también un equipo de expertos del Consejo Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por su siglas en inglés), acompañados de asesores técnicos de Boeing, la compañía fabricante del avión, y de la Administración Federal de Aviación estadounidense (FDA) para ayudar en las labores de investigación sobre lo ocurrido con el aparato.