La gobernadora de Arizona, Jan Brewer, ha vetado una ley, denominada de libertad religiosa, que muchos consideraban que legitimaría la discriminación contra los homosexuales en nombre de la religión. Brewer ha tomado también en consideración la oposición de la mayoría de las grandes empresas a este texto legal. La gobernadora considera, además, que la medida podría "crear más problemas que los que pretende resolver".

La ley, que fue aprobada la semana pasada por la cámara legislativa del estado, controlada por los republicanos, hubiera permitido a los propietarios de negocios alegar creencias religiosas como justificación legal para negarse a servir a parejas del mismo sexo y otros clientes homosexuales.

Esta medida era considerada como una reacción a la serie de decisiones de los tribunales federales que, en varios estados, desde Utah a Virginia, han reconocido el derecho a casarse de las parejas del mismo sexo.

Festejos

El veto impuesto por Brewer ha sido acogido con entusiasmo y festejos por la comunidad homosexual, así como por empresarios y activistas.

Brewer hizo una comparecencia pública y anunció el veto horas después de que en las redes sociales y en los medios de comunicación se insinuara que la Liga Nacional de Fútbol Americano consideraba seriamente retirar la Super Bowl del 2015 del estado de Arizona.

"La libertad de culto es un pilar de EEUU y de Arizona, al igual que es el no discriminar. Debemos dejar atrás la discusión horrible sobre esta ley y mirar hacia adelante para encontrar un entendimiento entre todos", ha dicho Brewer.

"No esperábamos una respuesta tan pronto, pero me alegra que la gobernadora tomara esta decisión, es la mejor que pudo haber tomado, nadie tiene el derecho a juzgar ni discriminar a nadie", dijo Mary Johnson, una de las docenas de manifestantes que se habían concentrado a las afueras del capitolio estatal.