Por primera vez desde que estalló la guerra en Ucrania, varios proyectiles de artillería pesada han impactado cerca del centro de la ciudad de Donetsk, uno de los principales bastiones de los rebeldes prorrusos. Las explosiones han dejado un balance provisional de un muerto y varios heridos.
No está claro todavía si los obuses han sido disparados por el Ejército ucraniano -que siempre ha negado el uso de artillería pesada y aviación contra zonas pobladas- o por fuego de los mismos rebeldes. Dos proyectiles cayeros a apenas 200 metros del parque Inn Radisson, donde está ubicado uno de los principales hoteles de la ciudad.
El ataque ha afectado también el patio de un hospital y una zona residencial de chalets, mientras dos centros comerciales han sufrido daños de diversa consideración. "Ha comenzado el bombardeo de la ciudad", ha asegurado Andréi Purguin, viceprimer ministro de la autoproclamada república popular de Donetsk.
Mensaje del alcalde
El alcalde de la ciudad ha pedido a la población que no salga a las calles bajo ninguna circunstancia, ya que se oyen explosiones en casi todo Donetsk. "La situación en Donetsk es tensa. Según los propios ciudadanos, prácticamente en todos los barrios de la ciudad se oyen sonidos de artillería pesada y explosiones", señala el comunicado municipal.
Por otro lado y como respuesta al convoy con ayuda humanitaria enviado por Moscú a las zonas rebeldes -280 camiones que no han sido autorizados a entrar en territorio ucraniano- las autoridades de Kiev han enviado a Donetsk y Lugansk otro convoy de 75 camiones cargados con productos de primera necesidad para la población civil.
