Un hombre ha apuñalado a varias personas este viernes en una céntrica plaza de la ciudad finlandesa de Turku, según ha informado la policía. El atacante ha causado dos muertos y seis heridos. Los agentes policiales han detenido al agresor tras dispararle contra las piernas. La policía ha confirmado que el detenido es extranjero, pero por el momento no ha calificado el suceso de atentado terrorista.

Una de las víctimas mortales resultó inicialmente herida que pero falleció después el hospital, según confirmaron fuentes hospitalarias. El otro debió fallecer en el momento del ataque ya que algunas imágenes del lugar del incidente mostraban un cuerpo inmóvil sobre el pavimento tapado con una sábana..

Tras el incidente, la policía ha evacuado la zona y ha pedido a los ciudadanos que no se acerquen al centro de la ciudad hasta que la policía compruebe que ya no existe peligro. Turku es una ciudad de tamaño mediano situada en el sudoeste de Finlandia, a unos 160 kilómetros de la capital, Helsinki.

La policía ha decidido reforzar la seguridad en el aeropuerto de Helsinki y en todas las estaciones ferroviarias. Posteriormente la policía ha anunciado, en un mensaje en Twitter, que busca a otros sospechosos. No se sabe con seguridad si había más de una atacante.

Reunión de urgencia

El primer ministro, Juha Sipila, ha escrito en Twitter que su Gobierno sigue de cerca los acontecimientos y la operación policial desplegada en Turku y ha anunciado que el Ejecutivo mantendrá una reunión de urgencia esta misma tarde. La ministra del Interior, Paula Risikko, y el jefe de Policía se han desplazado a Turku. Risikko ha declarado al rotativo 'Helsingin Sanomat' que desconoce si el ataque está relacionado con el terrorismo.

Algunos testigos han comenzado a detallar lo ocurrido. Laura Laine, una transeunte, ha afirmado que fue alertada por los gritos de una joven en una esquina de la plaza del mercado. "Vimos a un hombre en la plaza; tenía un cuchillo en la mano y lo balanceaba en el aire; entendimos que había apuñalado a alguien", ha explicado a la cadena finlandesa YLE.

Finlandia es tradicionalmente un país tranquilo, pero los servicios de seguridad subieron el pasado junio el nivel de alerta por amenaza terrorista. El Gobierno se ha mostró preocupado sobre un posible ataque después de que el pasado abril un yihadista de nacionalidad uzbeka atropellara a un multitud con un camión robado y matara a cuatro personas en el centro de Estocolmo, la capital de la vecina Suecia.