El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasir Arafat, viajó ayer a París, donde fue ingresado en el hospital militar Percy. Un equipo médico comenzó los exámenes clínicos para diagnosticar el mal que le aqueja, algo que tardará algunos días en conocerse. Arafat, de 75 años, salió de la Mukata en helicóptero y viajó hasta Amán, donde lo recogió un avión medicalizado que le envió el presidente francés, Jacques Chirac. Arafat llegó a París visiblemente cansado y entró en el hospital en camilla.

La delegada de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Francia, Leila Shahid, dijo que Arafat "llegó sonriente, fatigado pero consciente". Shahid agregó que el palestino se sentía "aliviado y feliz", por encontrarse en un "verdadero hospital", con "tecnología punta". Shahid señaló que los exámenes a los que se someterá a Arafat tardarán "varios días".

PLAQUETAS INSUFICIENTES Los médicos de Arafat en Ramala explicaron el jueves por la noche que el presidente presenta una insuficiencia de plaquetas en la sangre, pero recalcaron que se precisan pruebas para determinar el origen del problema. En el entorno de Arafat, se habla insistentemente de una leucemia. También han surgido rumores de que padece cáncer de estómago.

Un médico francés señaló que la destrucción de las plaquetas por las células sanguíneas que normalmente matan los microbios hace pensar en un cáncer en estado avanzado. Shahid insistió en que Arafat ha sufrido una "gripe intestinal" en los últimas 14 días, pero que está "mucho más cansado" de lo que se considera normal en una dolencia como ésa.

La hospitalización de Arafat en París fue una decisión personal de Chirac, en respuesta a una petición del primer ministro palestino, Ahmed Qurei, por canales diplomáticos. Desde Roma el propio Chirac dijo que era "evidente" que Francia, "tierra de acogida", no iba a cuestionar el derecho del líder palestino a seguir un tratamiento en este país.

Pero este trato humanitario no disuadió a las familias francesas de las víctimas de atentados suicidas en Israel, que anunciaron que van a pedir al juez antiterrorista Jean-Louis Brugui¨re que interrogue a Arafat "cuando su estado se salud lo permita", según precisó el abogado Michel Calvo. Esto es algo impensable, puesto que el dirigente palestino es un invitado del Estado francés y goza además de inmunidad diplomática.

Arafat llegó a París acompañado de una delegación de 18 personas y de su esposa, Suha, que sigue siendo una de sus principales aliadas, pese a que están separados. Suha y Arafat tienen una hija de 9 años que vive con su madre en Francia. Junto al rais se encuentran también su principal asesor, Nabil Abú Rudeina, y su principal adversario político, Mohamed Dahlán.

SESION DE URGENCIA Fuentes palestinas informaron de que hoy está convocada una sesión de urgencia del Comité Ejecutivo de la OLP y del Comité Central de Al Fatá para debatir quién asume temporalmente el liderazgo palestino. Será la primera vez en 40 años que la OLP se reúna sin Arafat y la primera vez en su historia que eso suceda con Al Fatá.

Es probable que ambos organismos de dirección decidan que Mahmud Abás y Ahmed Qurei --como número dos de la OLP y primer ministro de la ANP, respectivamente-- asuman el liderazgo palestino de forma colegiada, sólo ellos dos o con la ayuda de algún otro dirigente.