Nueva Delhi La muerte de 90 niños en el incendio de una escuela en el estado indio de Tamil Nadú ha sumido en el dolor y la indignación a toda la India, a medida que cobra fuerza la tesis de que la tragedia pudo deberse a la negligencia de la dirección del centro, que incumplió varias normas de seguridad. Además del director, otras cuatro personas están detenidas. Según la policía india, los arrestados podrían ser acusados de "negligencia con resultado de muerte" cuando se complete la investigación sobre el suceso. Los bomberos del distrito han asegurado que ninguno de los profesores del colegio murió en el siniestro, aunque algunos medios de comunicación señalan que dos fallecieron al intentar rescatar a los niños. En la noche de ayer, grupos de personas permanecieron en las cercanías de la escuela indignados por la "huida de los profesores, dejando a su suerte a los niños, casi todos de 6 a 8 años", según reiteraron una y otra vez a las emisoras de televisión. En la foto, una mujer llora a dos de sus familiares muertos, de 7 y 12 años.