Irán amenaza con responder a cualquier país que lleve a cabo ciberataques contra sus instalaciones nucleares, tras lanzar la sospecha de que esa es la causa del incendio declarado esta semana en la planta de enriquecimiento de uranio de Natanz. Las autoridades iranís han informado que la causa del "incidente" ya ha sido establecida, pero que debido a "consideraciones de seguridad" la harán pública a su debido tiempo.

"Si se prueba que nuestro país ha sido objetivo de un ciberataque, responderemos", ha afirmado este sábado el jefe de la defensa civil iraní, Gholamrez Jalali. Ya con anterioridad, la agencia estatal de noticias IRNA había apuntado la posibilidad de un sabotaje por parte de Estados Unidos o Israel, aunque sin acusarlos directamente.

La agencia advirtió que "la estrategia" oficial es "impedir cualquier escalada" pero que "podría ser fundamentalmente revisada" si "se comprueba que países hostiles, en particular el régimen sionista y Estados Unidos, franquean las líneas rojas".

Irán informó el jueves de un accidente que no causó víctimas ni "contaminación" radioactiva en el complejo de Natanz . El portavoz de la Organización Iraní de Energía Atómica (OIEA), Behruz Kamalvandi señaló que "no había trabajadores en el lugar y no se produjeron víctimas", y añadió que "no hubo interrupción de la actividad del centro de enriquecimiento".