La Fuerza Naval de la Guardia Revolucionaria de Irán capturó ayer un petrolero extranjero en el golfo Pérsico bajo la acusación de hacer contrabando de combustible con algunos estados árabes y, además, arrestó a los siete marineros del buque, de distintias nacionalidades, según informó la televisión estatal iraní. La nave, de la que no se ha revelado la nacionalidad, fue interceptada cerca de la isla de Farsi por la noche, según indicó la agencia de noticias semioficial iraní Fars. La televisión libanesa Al Mayadin señaló que el barco fue capturado el miércoles pasado.

«Las fuerzas navales de la Guardia Revolucionaria de Irán (GRI) se han apoderado de un petrolero extranjero en el golfo Pérsico que estaba realizando contrabando de combustible para algunos países árabes», anunció Ramezan Zirahi, comandante de la GRI. «Llevaba 700.000 litros de combustible. Siete marineros a bordo del buque tanque, que son de diferentes nacionalidades, han sido detenidos», agregó el oficial de este cuerpo militar de élite.

«El arresto del petrolero se ha llevado a cabo en coordinación con las autoridades judiciales de Irán, basándonos en una orden suya», añadió el comandante del Estado persa, que indicó que el barco se ha trasladado al puerto de Bouchehr y la carga que llevaba se ha entregado a las autoridades iranís.

El carguero detenido ayer es la cuarta nave capturada en el golfo Pérsico en el último mes por contrabando. El el pasado 14 de julio, la Guardia Revolucionaria arrestó otro buque que transportaba un millón de litros de combustible en el sur de la isla de Larak. Ese barco tenía bandera de Panamá y había pertenecido a una compañía emiratí, pero no ha quedado claro a qué país y a qué empresa está vinculado en la actualidad.

CRUDO A SIRIA

Días después, Irán también confiscó ese mismo mes un petrolero británico, el Stena Impero, en el estrecho de Ormuz. Teherán acusó al petrolero de bandera británica de incumplir las normas de navegación, algo que Londres y la naviera niegan rotundamente.

La Marina británica había interceptado dos semanas antes en Gibraltar al petrolero iraní Grace 1, que sigue retenido por sospechas de que transportaba crudo a Siria, país sujeto a sanciones de la Unión Europea (UE).

La captura del Stena Impero ha agravado la crisis en el golfo Pérsico y, en particular, en el estrecho de Ormuz, donde tanto Estados Unidos, enemigo de Irán, como el Reino Unido han propuesto enviar una coalición naval para escoltar a los barcos. La intención era que cada país escoltara militarmente a sus barcos con el apoyo del Ejército estadounidense, que garantizaría la vigilancia aérea de la zona y coordinaría las operaciones. No obstante, los aliados europeos de británicos y estadounidenses rechazaron la propuesta, ya que no se quieren unir a la política de «máxima presión» sobre Irán que lleva a cabo el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Las tensiones entre Irán y diversos países occidentales han aumentado desde que, en mayo del año pasado, Trump decretó la retirada de su país del acuerdo que había firmado junto a otras cinco potencias mundiales -Francia, Reino Unido, Alemania, Rusia y China- e Irán sobre el programa nuclear del régimen de Teherán.

Washington, además, volvió a imponer sanciones contra los iranís. Este castigo asfixia la economía del Estado persa, potencia regional de Oriente Próximo, miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y que dispone de la cuarta reserva de crudo del mundo y la segunda de gas. Washington ha impuesto sanciones económicas a los principales dirigentes iranís.

El golfo Pérsico ha sido escenario, en los últimos meses, de actos de sabotaje contra petroleros de los que Washington acusa a Teherán. No obstante, el régimen de los ayatolás niega estar implicado en estas acciones.

MÁS CONFLICTOS

También se han producido otro tipo de ataques a petroleros o buque cisterna. Entre ellos, destaca el que se produjo cuando Irán derribó un avión militar no pilotado (dron) de Estados Unidos, ya que según Teherán el dron sobrevolaba el país.Esto estuvo a punto de desencadenar un conflicto abierto entre las dos naciones, ya que Estados Unidos aseguró que el avión no tripulado fue derribado en aguas internacionales. El presidente estadounidense dijo que había ordenado bombardeos de represalia contra Irán, pero que decidió cancelarlos en el último momento.

La Guardia Revolucionaria subrayó ayer que «siempre está preparada para defender los intereses de Irán» y no escatimará en esfuerzos en esta misión.