El Ejército israelí mató ayer a cinco palestinos e hirió a otros 10 en una operación en la localidad de Abasan, en el sur de Gaza. Según la versión oficial del estamento militar israelí, estas operaciones pretenden debilitar a las milicias radicales de Hamas y de las Brigadas de Al Aqsa.

La operación provocó la muerte de al menos un civil. Sana, esposa de Basam Salem Qudeh, activista de Hamas, murió junto a su marido durante los enfrentamientos. El ataque se inició de madrugada, cuando las fuerzas militares israelís irrumpieron en Abasan con la intención de derribar la casa de Qudeh como medida de represalia.

El ministro de Defensa israelí, Shaul Mofaz, señaló que el Ejército continuará con estas operaciones con el objetivo de poner fin a los atentados y acabar con las donaciones de dinero a Hamas y a otros grupos radicales.