Egipto ha anunciado este domingo un nuevo alto el fuego de 72 horas entre Israel y las facciones palestinas de Gaza que permitirá reanudar inmediatamente las negociaciones indirectas para una tregua más duradera después de más de un mes de hostilidades. El alto el fuego ha entrado en vigor a las 00.01 del lunes hora local (23.01 del domingo hora peninsular y 21.01 GMT).

Los egipcios han estado permanentemente en contacto con los israelíes durante todo el día, aunque la delegación israelí había abandonado la capital egipcia en la mañana del viernes, un poco antes de que expirara el último alto el fuego de 72 horas sin que se concretara ningún avance.

La jornada ha estado marcada por declaraciones que mostraban posiciones inflexibles en las dos partes, al menos en apariencia. El primer ministro israelí, Binyamin Netanyahu, reiteró que no iba a negociar “bajo el fuego”, mientras que un portavoz de Hamás subrayó con ironía que Israel tampoco negocia cuando no hay fuego, como ocurre en la Cisjordania del presidente Mahmud Abás.

El líder de la delegación palestina, Azzam al Ahmed, que pertenece a Al Fatá, advirtió que no podía permanecer en El Cairo indefinidamente. "Tengo un pasaje de avión para las 9 de la noche. Si para entonces no hay progreso, subiré al avión y regresaré a Ramala para mantener consultas con Abás", advirtió Ahmed.

Ahmed también dijo que la delegación palestina rechaza las maniobras de Israel, expuestas durante la última tregua, de "trocear" el bloqueo de Gaza en distintas partes y aceptar solo una fracción de esas partes, así como sus intentos de imponer "condiciones previas".

Sobre el terreno, la jornada ha estado marcada por decenas de ataques de la aviación, la artillería y la marina israelís que costaron la vida a cuatro palestinos. En uno de los bombardeos murió un niño de 14 años y en otro una mujer. En otro resultaron heridos cuatro miembros de la familia Halabi en su domicilio de Beit Lahiya.

Las milicias palestinas han disparado más de una treintena de cohetes a lo largo del día que no han causado daños personales. Los proyectiles eran de corto alcance y cayeron en las zonas más próximas a la Franja. Por tercer día consecutivo las milicias de Hamás, las Brigadas Izz al Din al Qassam, se han abstenido de disparar.