Ivanka Trump, la hija favorita del presidente de EEUU, Donald Trump, ha desatado la polémica en las redes sociales tras difundir en Twitter, Instagram y Facebook una fotografía suya sentada en el sillón presidencial del Despacho Oval con su padre y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, de pie junto a ella, uno a cada lado.

"Buen debate con dos líderes mundiales sobre la importancia de que las mujeres tengan un asiento en la mesa", escribió en Twitter.

Tras difundirse la imagen, Ivanka ha recibido alabanzas de aquellos que la consideran un modelo a seguir y críticas de los que consideran que no ha hecho nada para merecer estar en el Despacho Oval.

La fotografía fue tomada después de que Trump y Trudeau participaran en la Casa Blanca en una mesa redonda con líderes empresariales y emprendedoras entre las que se encontraba Ivanka. Después de la reunión, ambos anunciaron la creación de un comité bilateral que abordará los desafíos de las mujeres en el ámbito laboral y cómo aumentar su participación en la economía.

SIN CARGO OFICIAL

Ivanka no tiene ningún cargo oficial en la Casa Blanca, pero actúa como si fuera la primera dama ante la ausencia de su madrastra, Melania Trump. La primera dama decidió seguir viviendo en Nueva York con Barron, el hijo de la pareja presidencial, hasta que este acabe en junio el curso escolar.

Desde que Trump llegó a la Casa Blanca, su hija Ivanka ha publicado varias fotografías en las redes sociales sobre su nueva vida en Washington, donde su marido, Jared Kushner, trabaja como asesor principal del presidente.

LA CONSIGNA DE CONWAY

La polémica en torno a Ivanka se suma a la provocada recientemente por Kellyanne Conway, consejera del presidente y exjefa de campaña de Trump, que la semana pasada pidió a los estadounidenses desde la sala de prensa de la Casa Blanca que compraran productos de Ivanka Trump.

Su intervención fue ampliamente criticada en EEUU puesto que, según los expertos, vulneró las normas éticas de los funcionarios públicos que impiden que un empleado utilice su cargo público para la promoción de cualquier producto, servicio o empresa, ya sea para su ganancia personal o la de sus amigos o familiares.

Trump salió también la semana pasada en defensa de su hija después de que los grandes almacenes Nordstrom anunciaran que dejarían de vender los productos de Ivanka.