Domenico Lucano, alcalde de Riace, el pueblo del sur de Italia modelo de integración, fue puesto en libertad el martes pero se le impuso la prohibición de residencia en esta localidad tras haber sido acusado de favorecer la inmigración ilegal, informa la prensa local.

Lucano compareció ante un tribunal para decidir si se prolongaba el arresto domiciliario que comenzó el 2 de octubre, cuando fue acusado de irregularidad en la atribución del servicio de recogida de basuras y en la gestión del sistema de acogida de los solicitantes de asilo a través de matrimonios de conveniencia.

CONTRA LA BARBARIE

Por otra parte, el juez decidió revocar la prohibición de residencia en Riace, en la región de Calabria, de Tesfahun Lemlem, pareja sentimental del alcalde, con la obligación de comparecer dos veces al día en la comisaría. A la entrada en el tribunal, Lucano dijo que "Riace representa una idea que va en contra de la civilización de la barbarie".

El alcalde es promotor de un aplaudido sistema de acogida para los solicitantes de asilo en un pueblo que registraba una grave despoblación. El modelo de integración puesto en marcha en Riace podría desaparecer después de la decisión del ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, de trasladar a otros lugares del país a los solicitantes de asilo alojados en ese pueblo de Calabria. Aunque después matizó que el traslado será voluntario y que no se obligaría a nadie a dejar el país.