Hubo, relativamente hace poco, un tiempo de discursos duros cruzados y evidente enfriamiento entre Argentina y España. La fricción se inició en abril del 2012, cuando la presidenta Cristina Fernández de Kirchner ordenó la expropiación del 51% de las acciones que tenía Repsol en YPF. El ministro español de Industria, José Manuel Soria, afirmaba entonces, al comienzo de la escalada de tensión, que cualquier "gesto de hostilidad" contra empresas de su país sería interpretado como un gesto "hacia España". Y que la expropiación traería "consecuencias".

Hubo consecuencias. Pero el tono de las declaraciones se fue atenuando a medida que se acercaban discretamente las posiciones sobre el 'caso Repsol'. La decisión argentina de pagar la indemnización a la petrolera con títulos públicos ha terminado por modificar el escenario bilateral. El próximo paso con el que se formalizará el acercamiento mutuo encontrará será la visita a Madrid el próximo mes de junio del canciller Héctor Timerman. Traerá consigo una invitación al presidente Mariano Rajoy para que visite oficialmente la ciudad de Buenos Aires. De acuerdo con fuentes diplomáticas, el jefe del Gobierno español viajaría en la primera quincena de julio.

En busca de una "relación estratégica"

Siempre según las mismas fuentes, el viaje de Rajoy estaría relacionado con el interés de la Moncloa por plantearle a los anfitriones una "relación estratégica" como la que España ya tiene con los principales miembros de la Unión Europea o con países como México o Marruecos. España tiene en Argentina inversiones por 29.000 millones de euros.

El acercamiento hispano-argentino, materializado en la indemnización de Argentina a Repsol, se produce en un momento en el que el Gobierno kirchnerista redobla sus esfuerzos por normalizar sus relaciones con el Club de París y, de esta manera, acceder a fuentes de financiamiento externo.

"Se trata de cerrar un círculo y mejorar definitivamente las relaciones bilaterales entre España y Argentina. Y Cristina quiere ser la que cierre ese círculo", ha explicado un funcionario kirchnerista al diario 'La Nación'. "Tras el acuerdo con Repsol y de los gestos que está dando Argentina hacia el mundo, las cosas cambiaron y hay mejor clima en España", ha señalado a su vez al mismo diario una fuente diplomática española.