Una decena de blindados de EEUU, acompañados de vehículos de la policía y de las fuerzas civiles iraquís, penetraron ayer por vez primera en Faluya, feudo de la revuelta suní, y realizaron una patrulla simbólica. Tras el pacto acordado entre los marines y las tribus sunís a finales de abril, tan sólo efectivos de la policía iraquí y de la recién creada Brigada de Faluya habían realizado patrullas en la región.

El general James Conway, comandante del Primer Cuerpo Expedicionario de Marines, dijo a principios de mayo que el primer convoy conjunto sería un "examen" para probar la viabilidad del acuerdo. A pesar de la distensión, durante la mañana de ayer se escucharon una decena de fuertes explosiones, según constató un corresponsal de AFP. Después, helicópteros y aviones AC-130 sobrevolaron la zona. Según los observadores, si la experiencia tiene éxito, podría constituir el punto de partida de un repliegue sustancial.