Los médicos austriacos que atienden a Viktor Yuschenko no tienen "ninguna duda" de que el candidato opositor a la presidencia de Ucrania sufre un envenenamiento por dioxina, probablemente "administrada por vía oral y por una tercera persona".

Tras tres meses de polémica, los médicos declinaron pronunciarse ayer sobre la intencionalidad de este envenenamiento, argumentado que corresponde a las autoridades investigarlo. Horas después, la Fiscalía de Ucrania decidió reabrir la investigación por intento de atentado contra el dirigente opositor, una investigación que se abrió el 21 de septiembre y que se cerró un mes después.

El diagnóstico definitivo de los doctores Michael Zimpfer y Nikolai Korpan se produjo horas después de la llegada de Yuschenko a Viena, para someterse a nuevos análisis con el fin de encontrar el origen de su mal, que le ha provocado desfiguración facial y fuertes dolores de espalda. Los nuevos análisis revelaron "una concentración enorme de dioxina", hasta niveles 1.000 veces superiores a lo normal, en el cuerpo de Yuschenko, lo que llevó a los médicos a determinar que su ingestión se produjo seguramente por vía oral y a sospechar de "la participación de terceras personas".

DILUIDA EN GRASA Zimpfer, director de la clínica Rudolfinerhaus de Viena, añadió que esta sustancia tóxica es "extremadamente fácil de diluir en la grasa", por lo que resultaría sencillo ocultarlo en "una sopa" con suficiente grasa. Tras afirmar que "no existe duda alguna" del envenenamiento, el médico instó a averiguar "quién cocinó, qué ingredientes se utilizaron y quién participó en la comida" que tomó días antes de su primer ingreso en la clínica de Viena, en septiembre.

"La dioxina no es un producto que se pierda en casa. No estamos tratando de un accidente doméstico", añadió el doctor, al precisar que se trata de una sustancia industrial utilizada, por ejemplo, en la elaboración del agente naranja que fue desarrollado por los norteamericanos en Vietnam.

NUEVOS EXAMENES Los médicos basaron su "diagnóstico final" en observaciones clínicas, en los cambios cutáneos del paciente, en muestras de sangre y en el estudio en el microscópico de muestras de tejidos. Esta evaluación fue realizada gracias a unos exámenes completos realizados en la noche del viernes al sábado y a los análisis efectuados en al menos dos laboratorios de Europa occidental.

El estado general de Yuschenko ha "mejorado mucho", indicaron los médicos. "Puede trabajar y su mal no es contagioso", precisaron. En el futuro, el carismático líder opositor no requerirá tratamiento en un centro hospitalario, sino que deberá someterse únicamente a chequeos médicos para controlar su evolución. Zimpfer especificó sin embargo que los síntomas de la intoxicación permanecerán "un largo tiempo" y no se atrevió a asegurar que "su cara pueda ser restaurada".

Los médicos establecieron el margen de tiempo de su envenenamiento entre el 5 y el 10 de septiembre, fechas coincidentes con una cena que celebró con altos cargos del SBU, los servicios secretos ucranianos, herederos del KGB soviético.