Al menos 23 soldados ucranianos han muerto y 93 han resultado heridos en las últimas 24 horas en el este de Ucrania a manos de los separatistas prorrusos,han informado las autoridades de este país.

Los milicianos prorrusos han reconocido la autoría del ataque que se produjo sobre las 04.00 de la madrugada (01.00 GMT) junto a la localidad de Zelenopólie, en la región de Lugansk, escenario de los más encarnizados combates desde la rendición de Slaviansk el pasado fin de semana.

Los separatistas han empleado fuego de lanzaderas de misiles de bocas múltiples "Grad", que ha causado 19 bajas mortales, según el secretario del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania, Andréi Lisenko, quien ha reducido la primera cifra oficial proporcionada por Interior.

En una de las jornadas más trágicas para el Ejercito ucraniano desde el inicio de las acciones militares en el este sublevado del país hace tres meses, el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, ha prometido encontrar y castigar a los responsables de la muerte de los soldados.

"Por cada vida de nuestros militares, los guerrilleros pagarán con decenas y cientos de los suyos. Ni un solo terrorista escapará al castigo y recibirá lo merecido", ha aseverado Poroshenko.

Un arma efectiva

Los sistemas móviles 'Grad' (Granizo), una de las armas más efectivas para enfrentarse a tropas de infantería, cuentan con hasta 40 bocas instaladas sobre un camión y, con un alcance de 40 kilómetros, son capaces de barrer en una andanada completa una superficie de 15 hectáreas.

Aunque las autoridades ucranianas han insistido en que la "operación antiterrorista" contra los sublevados acabará más pronto que tarde y llegará la paz, no pasa un día sin que se hayan registrado muertes no sólo entre soldados y milicianos, sino también entre ciudadanos pacíficos.

Al menos ocho civiles han perdido la vida en las últimas 24 horas en las regiones de Donetsk y la vecina Lugansk, cuya capital homónima, de medio millón de habitantes, es sometida a diario al fuego de artillería.

Un proyectil de artillería se ha llevado la vida este viernes de cuatro mineros y ha herido a otros 16 en la ciudad de Chervonopartizansk, cerca de la frontera rusa en la región de Donetsk, mientras que el impacto de varios obuses ha provocado una explosión en una mina que mató a un hombre en Lugansk.

Junto a otra mina de carbón, en la región de Lugansk, dos personas murieron al pisar una mina, según el Ministerio de Interior ucraniano.

Y, en la capital de esa región, una mujer de 48 años ha recibido un mortal disparo cuando salió al balcón de su vivienda, según la asamblea municipal de la ciudad.

El Ministerio de Sanidad de Ucrania ha informado de que los tres meses de conflicto en el este del país se han cobrado la vida de 478 civiles, entre ellos 30 mujeres y siete niños.

Las fuerzas ucranianas y los milicianos prorrusos combaten desde hace semanas por el control de la frontera ruso-ucraniana, tomada parcialmente por los separatistas al inicio de las operaciones militares en la zona.

El Ejecutivo de Kiev ha informado este viernes de la muerte de al menos 50 milicianos en un ataque aéreo del Ejercito ucraniano junto la localidad de Izvárino, donde se encuentra uno de los principales puestos fronterizos entre Rusia y Ucrania.

Tras el ataque, las autoridades ucranianas han anunciado que habían recuperado el control de prácticamente toda la frontera, incluidos los tres puestos fronterizos (Izvárino, Chervonopartizansk y Dovzhanski) cuya pérdida lamentaba Poroshenko en la última cumbre de la Unión Europea celebrada en Bruselas en la última semana de junio.

Los Veintiocho han exigido entonces a Rusia que cooperara con Kiev en la recuperación de esos tres puestos bajo la amenaza de sanciones económica contra Moscú si no accedía a ello.

Mientras los rebeldes prorrusos han desmentido la pérdida del puesto fronterizo de Izvárino, en la región de Lugansk, el centro de prensa de las fuerzas ucranianas reconoció que los milicianos combaten para recuperar el control de la frontera.

"Hoy, el epicentro de la feroz resistencia (de los insurgentes) se ha acercado a las inmediaciones de la frontera estatal. La situación sigue siendo tensa", ha informado.