De todos es conocido que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se convierte ahí donde va en el centro de todas las miradas y de todos los focos, esté con quien esté, pero últimamente la atención es mayor cuando le acompaña su mujer, la primera dama Melania Trump. Y lo es por los rumores que indican que la relación entre ambos pasa por un mal momento. Las especulaciones de basan, principalmente, en pequeños gestos que a primera vista son poco perceptibles, pero que si se busca el detalle con la imagen fija o la cámara lenta invitan cuanto menos a la sospecha.
El último es de este mismo lunes. La pareja caminaba, él enfundado en un largo abrigo negro y ella con otro de color amarillo, en dirección al helicóptero presidencial en los jardines de la Casa Blanca. En un momento parece que el presidente intenta tomar la mano a su mujer y que ésta le rechaza mientras se coloca frente a su marido y luego se aleja al menos un metro de él, como si quisiera disimular el desaire.
No es la primera vez que los medios detectan esta supuesta actitud de desprecio de Melania hacia el magnate. Ocurrió de manera similar el pasado mes de mayo en el viaje oficial que llevaron a cabo a Israel, luego, al día siguiente, cuando llegaron a Roma.
Los rumores sobre su distanciamiento se han incrementado tras hacerse pública la relación que el magnate mantuvo hace diez años con la actriz porno Stormy Daniels a quien un abogado de Trump pagó hasta 130.000 dólares un mes antes de las elecciones presidenciales a cambio de que no revelase lo sucedido. La relación de Trump com Daniels sucedió un año después de que el magnate contrajera matrimonio con Malenia y cuatro meses después de que ésta diera luz al único hijo de la pareja, Barron.
Noticias falsas
"Ella (Melania) está concentrada en su familia y en su papel como primera dama estadounidense, no en los escenarios irreales que diseminan cada día las noticias falsas", tuiteó Stephanie Grisham, portavoz de Melania, tras calificar de "rotundamente falsas" las noticias sobre la supuesta mala relación aparecidas en "publicaciones sensacionalistas y programas de televisión" que se han "extendido a los medios generalistas».
Dijera lo que dijera Grisham a nadie le dejó indiferente que Melania no eligiera ninguna imagen junto a su marido para celebrar el primer año como primera dama de Estados Unidos, no acompañara a su marido al Foro Económico Mundial de Davos y que acudiese en solitario al primer discurso sobre el Estado de la Unión de Trump como presidente de EEUU.
