El presidente de EEUU, Barack Obama, envió hoy al Congreso un informe sobre las negociaciones nucleares con Irán, en un nuevo esfuerzo para tratar de convencer a los legisladores, incluidos los de su propio partido, de no imponer nuevas sanciones a Teherán.

El documento contiene detalles técnicos sobre el acuerdo alcanzado entre las potencias del G5+1 e Irán, que se aplicará a partir del 20 de enero y del que sólo se ha hecho público un breve resumen por deseo expreso del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), explicó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.

La publicación del informe se enmarca en la batalla en la que está inmerso Obama para defender su postura sobre Irán mientras el Senado prepara una ley bipartidista para imponer nuevas sanciones a la República islámica.

El presidente estadounidense no sólo tiene que lidiar con la oposición republicana sino que también encuentra reticencias entre los legisladores demócratas, a los que pidió el miércoles, en su primera reunión del año, que cerraran filas y evitaran nuevas sanciones.

El proyecto de ley sobre Irán que se negocia en el Senado y que está impulsado por el senador demócrata Robert Menéndez y el republicano Mark Kirk ya ha recabado el respaldo de 59 legisladores, lo que lo sitúa a un voto de lograr los 60 necesarios para ser aprobado en la Cámara Alta.

Pese a que la Casa Blanca ha amenazado con vetar la ley, los senadores podrían sortear ese veto si logran aprobar el proyecto con 67 votos a favor, un objetivo que no queda muy lejos.