El presidente de facto de Venezuela, Nicolás Maduro, no convocó nuevas elecciones presidenciales en el plazo de ocho días que le exigieron España, Francia, Alemania y Reino Unido el pasado 26 de enero. El resultado no se hizo esperar ayer: una cascada de reconocimientos de gobiernos europeos a Juan Guaidó «-aunque a título individual- como presidente interino encargado de llevar al país hacia nuevas elecciones presidenciales. En total, 19 países de la UE suscribieron una declaración de apoyo al líder opositor. El texto, que fue secundado por España, Portugal, Alemania, Reino Unido, Dinamarca, Holanda, Francia, Hungría, Austria, Finlandia, Bélgica, Luxemburgo, República checa, Letonia, Lituania, Estonia, Polonia, Suecia y Croacia, señala que toman nota de que «Nicolás Maduro ha optado por no poner en marcha el proceso electoral» y anuncian que «reconocen a Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional democráticamente elegida, como presidente encargado de Venezuela, a fin de que convoque elecciones presidenciales, libres y democráticas».

La declaración, que no fue suscrita por nueve estados miembros, fue pactada después de que hiciera aguas el último intento de la UE por cerrar una posición común de los 28 en torno al papel del líder opositor. Como ya ocurriera hace unos días, el bloqueo de Italia lo impidió. «No vamos a publicar ningún texto sobre Venezuela» porque «una delegación no estaba en posición de dar su acuerdo», explicaron fuentes diplomáticas sobre las negociaciones de una nueva declaración conjunta a 28.

«Hay algunos países que todavía siguen oponiéndose», admitió poco después el ministro de Exteriores español, Josep Borrell. El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, apuntó al culpable con nombre y apellidos. «Italia ha bloqueado la posición conjunta de la Unión Europea a reconocer al jefe de la Asamblea Nacional de Venezuela como presidente interino», lamentó.

El texto en cuestión, al que tuvo acceso este diario, reafirma de nuevo el apoyo de la UE a la Asamblea Nacional y a su presidente y, expresaba el reconocimiento de «los estados miembros individuales» a Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional, como presidente interino de Venezuela« para «llevar al país hacia elecciones presidenciales libres, justas y democráticas, en línea con las disposiciones de la Constitución venezolana». Esta formulación no logró superar las reticencias de Italia pese a los llamamientos a la responsabilidad de su presidente, Sergio Matarella, a la coalición de gobierno formada por la Liga Norte y el M5S, que afronta dividida el debate sobre Guaidó.

La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, restó importancia a estas divergencias. «La posición está clara. Los estados miembros nunca han reconocido como legítimas las elecciones presidenciales del año pasado, no participamos en la toma de posesión del 10 de enero y reconocemos a la Asamblea Nacional como la institución legítima del país», reiteró recordando que es prerrogativa nacional reconocer a Guaidó.

Esa falta de unanimidad no impidió la oleada de reconocimientos a Guaidó. El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, fue el primero en dar el paso y legitimar oficialmente al nuevo presidente interino con el objetivo de que organice nuevos comicios. «El horizonte es claro: convocar elecciones en el menor plazo tiempo posible, libres, democráticas, con garantías y sin exclusiones, en las que los venezolanos decidan su futuro sin miedos, ni presiones, ni amenaza. Es el pueblo de Venezuela quien tiene que decidir su futuro», avisó.

Siguiendo la estela de España se pronunciaron Francia, Reino Unido y Alemania. «Los venezolanos tienen derecho a expresarse libremente y democráticamente. Francia reconoce a Guaidó como presidente encargado de implementar un proceso electoral», indicó Emmanuel Macron en plena sintonía con el mensaje lanzado desde Alemania, Reino Unido, Holanda o Dinamarca. Otros países podrían sumarse en breve.

Es el caso de Eslovenia cuyo ministro de exteriores, Miro Cerar, también propuso al Gobierno el reconocimiento de Guaidó. Su homólogo irlandés, Simon Coveney, lo descartó aunque Irlanda apoya la declaración aprobada la semana pasada en la que se piden elecciones libres y justas en el país.

El presidente español también anunció su intención de promover en el seno de la ONU y de la UE un plan de ayuda humanitaria para paliar la grave crisis que sufren los venezolanos. Al hilo de esto Alemania anunció su disposición a enviar a Venezuela 5 millones de euros en ayuda humanitaria.