La Cámara baja de EEUU, liderada por la demócrata Nancy Pelosi, ha aprobado proyectos de financiación para poner fin al cierre parcial de la Administración que no incluyen recursos para el muro fronterizo México, exigencia sine qua non del presidente Trump para desbloquear la parálisis administrativa. Dichos proyectos pasarán ahora al Senado, donde se espera un rechazo de la mayoría republicana. Son los primeros pasos de un renovado Congreso, que ya en manos demócratas, complicará la segunda mitad del mandato del líder republicano.

Con una votación por 239-192, los legisladores dieron su visto bueno a un proyecto de ley de gastos a corto plazo para financiar el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) hasta el 8 de febrero, lo que supone un desafío al presidente Donald Trump.

Otro conjunto de recursos destinados a seis agencias hasta el próximo 30 de noviembre fue aprobado con una votación por 241-190.

Las iniciativas irán ahora al Senado, de mayoría republicana, por lo que expertos anticipan que no serán aprobadas en la Cámara alta.

En una conferencia de prensa tras su elección como presidenta de la Cámara de Representantes, Pelosi calificó el muro que propone construir el presidente estadounidense, Donald Trump, como "una pérdida de dinero".

Por su parte, el vicepresidente del país, Mike Pence, aseguró a la cadena Fox que "si no hay muro, no hay acuerdo".

La Administración entró el pasado 22 de diciembre en su tercer cierre parcial durante el Gobierno de Trump, después de que las negociaciones entre republicanos y demócratas en el Congreso no llegaran a buen puerto.

El punto de desencuentro es la exigencia Trump de que el proyecto de presupuestos incluya una partida de más de 5.000 millones de dólares para financiar el muro fronterizo entre su país y México.

La parálisis administrativa, que completó este jueves 13 días, afecta a agencias de diez departamentos del Ejecutivo, incluidos los de Transporte y Justicia; así como a decenas de parques nacionales, que suelen ser una gran atracción turística.