Ante la tormenta electoral causada por la desaparición de 380 toneladas de explosivos de un arsenal en Irak, el Pentágono alegó ayer que ese armamento fue retirado del país, "casi con toda certeza", por fuerzas especiales rusas semanas antes de la guerra, y llevado a Siria. Esta filtración al diario conservador The Washington Times responde a la exigencia de John Kerry de que Bush dé explicaciones.