El presidente ruso Vladímir Putin aseguró ayer al reunirse en Sochi (Rusia) con el líder sirio, Bashar al Asad, que espera que las tropas extranjeras abandonen Siria. «Esperamos que, debido a los considerables éxitos y victorias del Ejército sirio en la lucha contra el terrorismo, las tropas extranjeras sean retiradas del territorio de Siria», dijo Putin.

El líder ruso subrayó que otro factor para el repliegue de las fuerzas militares extranjeras es «el inicio de la fase más activa del proceso político». Al respecto, destacó que en la reunión con Asad «llegaron a la conclusión de que a día de hoy se dan las condiciones favorables para la activación del proceso político».

«Mucho ya se ha hecho durante el proceso de Astana. Mucho se hizo en el Congreso del Diálogo Nacional Sirio de Sochi. Ahora podemos dar juntos los próximos pasos», señaló, dirigiéndose a Al Asad. Y subrayó que «los terroristas han depuesto las armas en puntos clave en Siria, lo que ha permitido reconstruir las infraestructuras (...) y prácticamente impedir que actúen cerca de la capital del país».

«El presidente sirio ha tomado la decisión de enviar a su delegación para la formación del comité constitucional que debe trabajar en la Carta Magna siria», desveló sobre el acuerdo logrado en enero.