El nuevo Ejecutivo francés, el Gobierno Raffarin III , fue presentado ayer y destaca por tener una carga más política y una composición calculada para tener en cuenta todas las tendencias de la mayoría gubernamental. El Gabinete está compuesto por 30 ministros y 13 secretarios de Estado, y pretende responder a la profunda reforma exigida tras la debacle electoral de la derecha en las elecciones regionales del domingo.

El reajuste consiste esencialmente en un cambio de papeles para los pesos pesados del anterior Ejecutivo. El hasta ahora ministro de Interior, Nicolas Sarkozy, pasa a ser ministro de Estado y toma las riendas de un superministerio de Economía, Finanzas e Industria. En Interior, le sucede el caballero blanco de la diplomacia francesa, Dominique de Villepin, que deja Exteriores al hasta ahora comisario europeo Michel Barnier.

Nicolas Sarkozy, el ministro más popular de Francia y posible rival del presidente Jacques Chirac para el 2007, acepta el reto de la economía y la responsabilidad de las reformas criticadas por la izquierda.

Tres días después de la histórica derrota de la mayoría gubernamental, Jean-Pierre Raffarin fue confirmado en el cargo de primer ministro y, obedeciendo los deseos del jefe del Estado, reestructuró su equipo, presentado más que nunca como "un Gobierno con una misión".

EL MENSAJE DEL VOTO El mensaje de los electores parece que ha sido escuchado con el nombramiento de un superministerio de Empleo, de Trabajo y de Cohesión social, al frente del cual estará Jean-Louis Borloo, hasta ahora ministro delegado para la Ciudad. Chirac quiere reducir así la "fractura social", que con el anterior Gobierno se había agrandado.

La tarea de Borloo no será fácil, ya que deberá lidiar con el superministro Sarkozy, quien deberá seguir aplicando una política liberal e intentar que ésta sea popular.

Raffarin ha eliminado del Gobierno a casi todos los representantes de la "sociedad civil" a los que se les ha reprochado falta de profesionalidad, comenzando por el ministro de Educación, el filósofo Luc Ferry.