El Reino Unido ha decidido revocar la nacionalidad británica a Shamima Begum, de 19 años, que huyó a Siria en 2015 para unirse al grupo yihadista Estado Islámico (EI) y ha solicitado ahora regresar al país tras dar a luz en un campo de refugiados.

Begum abandonó el barrio londinense de Bethnal Green para unirse al Estado Islámico junto a dos compañeras de escuela, Amira Abase, que entonces tenía también 15 años, y Kadiza Sultana, de 16. Sultana murió supuestamente en un ataque aéreo ruso contra Al Raqa en 2016, si bien su fallecimiento nunca ha sido confirmado de forma oficial, mientras que el paradero de Abase se desconoce.

La familia de Begum ha divulgado una carta del Ministerio de Interior dirigida a la madre de la joven en la que le pide que comunique a su hija, "si puede establecer contacto" con ella, la decisión de retirarle la ciudadanía británica y las vías posibles de apelación.

El abogado de la familia, Tasnime Akunjee, ha informado de que los familiares están "muy decepcionados" por esa decisión y estudiarán las posibilidades legales para evitarla.

Begum, quien se encuentra en un campo de refugiados en el este de Siria, habló la semana pasada con un periodista del diario 'The Times' y le relató que quería regresar para que su hijo naciera en el Reino Unido. La joven ya ha dado a luz a un niño.

UN CENTENAR DE REVOCACIONES

En este contexto, el Gobierno británico ha retirado la ciudadanía a un centenar de presuntos yihadistas combatientes en Siria con doble nacionalidad británica y de otro país.

El ministro del Interior, Sajid Javid, compareció el lunes en el Parlamento para responder a preguntas urgentes de los diputados relativas al caso de la joven británica Shamima Begum, que huyó a Siria en 2015, cuando tenía 15 años, para unirse al grupo terrorista Estado Islámico (EI) y que ahora quiere regresar a este país para cuidar a su bebé recién nacido.

Aunque en sus declaraciones iniciales a la prensa en Siria no se mostró arrepentida, Begum ha pedido después disculpas por sus actos y dijo querer "rehabilitarse", pero su posible regreso causa gran controversia en el Reino Unido.

Preguntado sobre el caso, el ministro dijo a los diputados que no dudará "en prevenir" el regreso de los británicos que se fueron a luchar a Siria, dentro de los límites de la ley.

"INVESTIGADOS Y ACUSADOS"

Javid matizó, no obstante, que quienes solo tienen la nacionalidad británica, dado que, al amparo de la legislación internacional, no pueden ser dejados sin Estado, si vuelven serán "cuestionados, investigados y potencialmente acusados". "Si has apoyado el terrorismo, debe haber consecuencias", afirmó el responsable de Interior, en alusión al caso de la joven londinense.

Sobre los presuntos yihadistas de doble nacionalidad, explicó que sí se les puede retirar la ciudadanía británica, lo que ya ha sucedido "a unas cien personas". Javid estimó que unos 900 británicos han viajado en los últimos años a combatir en el bando de los islamistas en Siria e Irak.