La organización Reporteros sin Fronteras (RSF) aprovechó los últimos días del Mundial de fútbol de Brasil para presentar hoy una campaña de sensibilización sobre los ataques a la libertad de prensa que sufren "cotidianamente" los periodistas de ese país.

"En Brasil, el fútbol va mal, pero no tanto como la libertad de prensa", reza el eslogan de la campaña, ilustrada por una bandera de Brasil que muestra en el centro al Cristo del Corcovado entre lamentos, tapándose la cara con una mano.

De esa forma, Reporteros sin Fronteras quiere recordar que desde 2004 un total de 21 periodistas han muerto asesinados en Brasil, 12 de ellos en los últimos tres años.

"Abatidos sobre la vía pública, sus voces fueron a menudo sacrificadas en nombre de la corrupción, del narcotráfico y de los conflictos de intereses", lamenta RSF en un comunicado.

"La derrota del equipo de la Selecao durante el Mundial (por 1-7 en semifinales contra Alemania), por emotiva que pueda ser para los brasileños, no hará olvidar problemas más graves aún para el país, como el insatisfactorio nivel de libertad de información y, especialmente, de la seguridad de los periodistas en Brasil", declaro el secretario general de RSF, Christophe Deloire.

En 2014, esa organización ha contado al menos 54 agresiones a periodistas en Brasil, que actualmente ocupa el puesto 111 de 180 países en la clasificación mundial de la libertad de prensa que cada año elabora Reporteros sin Fronteras.