UN BRITANICO y un canadiense, ambos civiles, murieron ayer en la localidad iraquí de Mosul, a 350 kilómetros al norte de Bagdad, al ser tiroteados los vehículos en los que viajaban. Mientras, el administrador civil de Estados Unidos en Irak, Paul Bremer, realizó la entrega simbólica del primer ministerio, el de Sanidad, que vuelve al control absoluto de los iraquís. EFE