El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, ha pedido este sábado al secretario de Estado de EEUU, John Kerry, que obligue a Ucrania a suspender las acciones militares y a retirar las tropas del este rusohablante del país.

"La operación de castigo en el sudeste de Ucrania sumirá al país en un conflicto mortal entre hermanos", ha asegurado Lavrov en una conversación telefónica con Kerry, según informan las agencias rusas.

Lavrov, quien ha acusado a Kiev de "declarar la guerra a su propio pueblo", ha subrayado que el cese de la operación antiterrorista lanzada por Kiev y el repliegue de las tropas debe ser "inmediato".

Ofensiva en Donetsk

Ucrania inició en la madrugada del viernes una ofensiva para retomar el control sobre dos bastiones de los insurgentes prorrusos en la región minera de Donetsk: Slaviansk y Kramatorsk.

Asimismo, ha instado a Kerry a conminar a Kiev a liberar a los participantes en las protestas prorrusas, en línea con la amnistía estipulada por los acuerdos de Ginebra.

"Aún hay posibilidades, con la condición de que haya presencia en este proceso de representantes de todas las regiones y de que se ate en corto a los terroristas del [grupo ultranacionalista] Sector de Derechas que organizaron un sangrienta carnicería en Odesa", ha indicado.

"Manchadas de sangre"

Ucrania ha denunciado este sábado una provocación por parte de antiguos miembros del Gobierno exiliados en la vecina Rusia, mientras el Kremlin ha acusado a Kiev de "tener las manos manchadas de sangre".

Mientras, Estados Unidos tachó de "inadmisible" el brote de violencia vivida este viernes en Odesa e instó a Kiev a encontrar y castigar a los culpables.