El caos en los territorios palestinos no se limita a la franja de Gaza, sino que también se encuentra en Cisjordania. Después del intento de asesinato el pasado martes del exministro Nabil Amr en Ramala, un grupo de enmascarados secuestró ayer durante unas horas a Fadel Achuli, el vicegobernador de Naplusa, en una acción reivindicada por las Brigadas de Mártires de Al Aqsa. Achuli fue liberado en buen estado.

Naplusa --una de las ciudades más castigadas por el Ejército israelí en los últimos tiempos-- es zona franca para los milicianos armados a causa de la impotencia de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) para controlar sus actividades, en muchas ocasiones delictivas. Hace unos meses, las Brigadas asesinaron al hermano del alcalde, en un atentado dirigido contra el primer edil.

Mientras, el Consejo Legislativo (Parlamento) acentuó ayer la crisis política al exigir al presidente, Yasir Arafat, que acepte la dimisión que le presentó el primer ministro, Ahmed Qurei. Por 43 votos contra 4, los diputados aprobaron una resolución en la que se critica la incapacidad del Gobierno de Qurei para imponer la ley y se pide un nuevo Ejecutivo que pueda "afrontar los retos actuales". En la resolución, el Consejo Legislativo amenaza al rais con presentar una cascada de mociones de censura contra Qurei para forzar su renuncia.