EL PARLAMENTO EUROPEO se mantuvo ayer bajo alerta amarilla, el segundo nivel en la escala, tras la oleada de cartas incendiarias enviadas a varias personalidades de la Cámara. El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, recibió ayer un sobre con cartuchos usados y varios petardos. El envío carecía de un mecanismo para que explotara.