Unos 9.600 colegios electorales -de los que 1.563 se encuentran en la capital- han abierto sus puertas a las siete de la mañana de este martes en diversos puntos de Siria para que los 16 millones de ciudadanos llamados a las urnas puedan votar en las elecciones presidenciales, que ganará el actual jefe del Estado, Bashar el Asad, y que pretenden afianzarlo en el poder, aunque por primera vez tenga dos contrincantes. Los aspirantes a batir a Asad, Maher Abdel Hafez Hayar y Hasan Abdalá al Nuri, son rivales meramente simbólicos.

A media mañana, ya habían caído en diferentes zonas del centro de Damasco varios proyectiles sin causar víctimas, según informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). No obstante, en la capital siria ya había un gran número de votantes que habían llegado a los colegios a primera hora, tras pasar un buen número de controles de las fuerzas de seguridad.

Boicot

Los colegios han abierto solo en las zonas controladas por el Gobierno. Los rebeldes y la oposición política boicotean las elecciones y en las áreas en manos de los insurgentes no se celebra la votación.

Asad ha votado temprano en la escuela del Mártir Naim Muasiri, en el barrio de Al Malaki de Damasco, según ha informado la televisión oficial.?Algunos medios locales afines al régimen han publicado más tarde fotos en las que se ve votando a Asad y a su esposa, Asma.

Los candidatos Hayar y Al Nuri han ejercido su derecho al voto también en la capital siria. Hayar, diputado de la oposición tolerada, ha votado en el centro instalado en la sede del Parlamento.Al Nuri, exministro de Estado para el Desarrollo de la Administración Pública y de Asuntos Parlamentarios (2000-2002) lo ha hecho en el hotel Sheraton.?En declaraciones a la prensa, Al Nuri ha dicho que las elecciones de hoy suponen "una gran victoria nacional" en el camino hacia una "Siria nueva y democrática" y ha vaticinado el triunfo sobre los "terroristas", gracias a la voluntad popular.