Así entró ayer la imagen de Osama bin Laden en los hogares de los estadounidenses. Una vez más el terrorista más buscado del mundo supo utilizar como arma mediática los mecanismos televisivos de Estados Unidos.

Las imágenes de la cadena de televisión árabe Al Jazira fueron retransmitidas de forma simultánea por las cuatro grandes cadenas de televisión. En cuestión de segundos, la imagen y el mensaje amenazante del líder de la organización terrorista Al Qaeda llegaba con nitidez y de forma inmediata a millones de ciudadanos estadounidenses, los mismos que están llamados a ejercer su derecho al voto el próximo martes para decidir quién será el próximo presidente de Estados Unidos.