Donald Trump ha asistido el viernes enParís al tradicional desfile de la Fiesta Nacional francesa invitado por Emmanuel Macron, con ocasión de la conmemoración del centenario de la entrada de Estados Unidos en la primera guerra mundial con los aliados.

El presidente Trump, que llegó el jueves por la mañana a la capital francesa, acudió acompañado por su esposa, Melania, al palco oficial en la plaza de la Concordia, donde les esperaba la mujer de Macron, Brigitte.

El jefe del Estado francés llegó poco minutos después, tras recorrer la avenida de los Campos Elíseos en un jeep militar descapotable desde el que saludó a las tropas que le rendían honores y al público, y después de haber escuchado la Marsellesa -el himno nacional- flanqueado, entre otros, por su primer ministro, Edouard Philippe, y por la ministra de Defensa, Florence Parly. Macron y Trump se saludaron e intercambiaron algunas palabras.

En homenaje al papel de Estados Unidos en la victoria de los aliados en la primera guerra mundial, la parada militar en tierra la abren un grupo de militares estadounidenses. También sobrevolaran el cielo de la avenida de los Campos Elíseo ocho cazas estadounidenses (seis F-16 y dos F-22) justo después del paso de nueve Alphajet de la Patrulla de Francia. El desfile ha durado dos horas y han participado 3.720 militares, 149 vehículos, 62 motos, 241 caballos, así como 63 aviones y 29 helicópteros.

Las personas que esta mañana quisieron entrar en el perímetro de losCampos Elíseos tuvieron que pasar controles y permanecieron cerradas una quincena de estaciones de metro y de trenes de cercanías.