La noticia más esperada de la reunión del G-20 en Osaka se conocerá hoy. Solo después de la cumbre dentro de la cumbre que supone la reunión bilateral prevista entre los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump, y de China, Xi Jinping, sobre la guerra comercial y tecnológica que enfrenta a ambas potencias desde hace meses, se sabrá si se avanza en un acuerdo, si se agravan las tensiones o si se opta por una nueva tregua para dar más tiempo a la negociación.

Sin embargo, el presidente Trump se encargó ayer de dejar una nota de optimismo en el aire. Trump pronosticó que su reunión de hoy con Xi será «productiva» y «emocionante», pero al mismo tiempo negó ningún compromiso de tregua arancelaria. Esta es, sin embargo, la opción por la que apuesta la mayoría de los observadores.

Las diferencias entre ambas potencias por la hegemonía tecnológica en el mundo -que es la verdadera cuestión de fondo en la guerra comercial- y el boicot de EEUU al gigante chino Huawei salieron a relucir ya en la primera sesión de trabajo de la cumbre, sobre la economía digital. Trump hizo hincapié en la necesidad de garantizar la «fiabilidad y la seguridad de las redes de telecomunicaciones 5G», así como la protección de la propiedad intelectual. Xi Jinping, por su parte, dijo que China, en tanto que «país actor global en economía digital», se compromete «a fomentar la cooperación internacional y a mantener nuestros mercados abiertos».

La idea de que haya posibles avances en el terreno comercial parecía instalada entre los huéspedes del centro de convenciones de Osaka. El Gobierno de España también se mostró optimista sobre la posibilidad de un acuerdo de mínimos en materia de comercio internacional que, al menos, sirva para subrayar la importancia del libre comercio para la prosperidad de los países.

La ministra de Economía, Nadia Calviño, explicó que en las reuniones plenarias de ayer hubo numerosos llamamientos a «desactivar» la tensión comercial y a avanzar en la reforma de la Organización Mundial de Comercio (OMC) como árbitro multilateral en los conflictos.

CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO

Si modestas son las expectativas en materia de comercio, mucho peor son las que se refieren a las negociaciones en materia de lucha contra el cambio climático. «El clima es el tema más difícil» de la cumbre, subrayó el presidente francés, Emmanuel Macron. «Hay tres o cuatro países» que podrían rechazar firmar una declaración de apoyo al Acuerdo de París, dijo el mandatario galo, en una velada alusión a que Brasil, Turquía o Arabia secunden la postura adversa de Trump a implementar medidas para combatir el cambio climático.