La difusión de unos vídeos en las que se aprecia la celebración de una boda y, luego, el mismo lugar destruido, debilitó ayer aún más el argumento de EEUU de que sus fuerzas no bombardearon la semana pasada ninguna fiesta. En ese ataque murieron 41 personas, que según EEUU, eran combatientes.

Las imágenes fueron atribuidas a la agencia estadounidense Associated Press Television News (APTN) y difundidas por las televisiones árabes Al Arabiya y Al Jazira. En la cinta se muestra la ceremonia de una boda y un vehículo adornado que presuntamente es el de los contrayentes. Se ve también un músico tocando un órgano eléctrico. Las siguientes imágenes, filmadas al día siguiente, muestran el lugar destruido y se ve el cuerpo sin vida del organista.

Un portavoz militar insistió en la tesis de que las fuerzas de EEUU no bombardearon una boda, aunque es posible que en el lugar atacado se hubiera celebrado antes la ceremonia.

La violencia no cesa en Irak y desde el 5 de abril, fecha en que empezó la actual espiral de violencia entra las fuerzas ocupantes y las milicias shiís y sunís, han muerto 1.168 iraquís, según un recuento del Ministerio de Sanidad. Otros 2.350 han resultado heridos.

Dos británicos, miembros de una compañía privada de seguridad, y otras dos personas murieron ayer por la mañana en Bagdad cuando una bomba explotó junto al vehículo blindado en el que viajaban. El atentado siguió a una noche de violencia en el barrio shií de Ciudad Sadr, donde murieron 18 iraquís.