Las autoridades de Vietnam y Malasia han desmentido que se hayan encontrado restos del avión de Malaysia Airlines desaparecido con 239 personas a bordo en contra de lo que han anunciado las autoridades de China, que han divulgado imágenes de satélite en el que se aprecian posibles piezas de la aeronave. Sigue pues el misterio sobre el destino del aparato, que ha abonado una nueva pista aportada por investigadores de EEUU, que sostienen que el avión siguió volando cuatro horas después de desaparecer del radar.

El vicedirector de aviación civil vietnamita, Dinh Viet Thang, ha explicado que este jueves varios aviones han sobrevolado la zona en la que, según China, estaban los supuestos restos del avión y no han encontrado nada. "Hemos enviado dos aviónes a inspeccionar las aguas cercanas a la isla de Con Dao donde fueron detectados los tres objetos sospechosos detectados por el satélite chino. Han regresado sin encontrar nada", ha apuntado. Tampoco un avión malasio ha encontrado nada tras sobrevolar la zona.

En los trabajos de búsqueda del avión participan 12 países, entre ellos EEUU, China y Japón, que han movilizado a 39 aviones y 42 barcos. Cubren una superficie de 90.000 metros cuadrados sin ningún resultado por el momento.

Cuatro horas más de vuelo

Al margen de la búsqueda sobre el terreno, los investigadores también analizan todas las hipótesis abiertas. Según publica 'The Wall Street Journal', los investigadores estadounidenses creen que el avión de Malaysia Airlines pudo haber seguido volando unas cuatro horas más después de la última vez en que se tuvo señal de él. Esta sospecha se basa en "la información enviada automáticamente desde el motor del Boeing 777-200", han detallado estas fuentes al rotativo neoyorquino.

El vuelo MH370 lo operaba un Boeing 777-200 que llevaba carburante para 7,5 horas de vuelo y transportaba a 239 personas de Kuala Lumpur (Malasia) a Pekín. Según relata el diario estadounidense, el fabricante del motor del avión, Rolls-Royce, recibe automáticamente los datos de la altura y velocidad de los aparatos como parte de sus acuerdos de mantenimiento con la aerolínea. Los investigadores analizan ahora estos datos para determinar hacia dónde se dirigió el avión una vez que se perdió todo contacto con él.

Hacia el Índico, Pakistán o el mar Arábigo

Según sus estimaciones, si el avión voló cuatro horas más después de que se le perdiera la pista podría haber recorrido una distancia adicional de 2.200 millas náuticas, lo que le habría permitido alcanzar, aseguran, puntos como el océano Índico, la frontera con Pakistán o el mar Arábigo.

Una de las hipótesis que barajan los investigadores es que una o varias de las personas a bordo cambiaran el rumbo del avión "con la intención de usarlo para otro propósito", han apuntado las mismas fuentes.