José Luis Rodríguez Zapatero se mostró ayer exultante por la aprobación de la Constitución europea, que definió como un buen acuerdo para Europa y para España. El presidente del Gobierno proclamó que España "ha ganado en influencia" en la UE y que tiene "salvaguardados" sus "intereses esenciales" en la nueva arquitectura de la Unión.

"Siento una enorme satisfacción como europeo y español", proclamó Zapatero. El jefe del Ejecutivo, que celebró la perspectiva de que España recupere 4 o 5 escaños en el Europarlamento, se preció de haber mejorado la posición en el reparto de poder. El presidente dijo que el plan que él recibió del PP era el de la Convención, que exigía para la aprobación de cualquier ley el apoyo del 50% de los estados que representaran el 60% de la población.

OBJETIVO CONSEGUIDO "A España le interesaba aumentar el umbral de la población, y lo hemos conseguido", dijo. La Constitución eleva ese porcentaje hasta el 65% que, aunque se queda 1,6 puntos por debajo del objetivo inicial de Zapatero, deja a España con una significativa influencia para impulsar iniciativas.

Por otro lado, la diplomacia española está gestionando un encuentro de Zapatero con George Bush la próxima semana en Estambul (Turquía), aprovechando la cumbre de la OTAN.