La poeta gallega, conocida en Instagram como @demisletras, presentó ayer en el Ámbito Cultural de El Corte Inglés su primer libro, ‘Kilómetro 0’ (Valparaíso), coincidiendo con la celebración del Día de las escritoras.

—'Kilómetro 0' siempre es el comienzo de los viajes, también de este...

—Yo tengo a mi pareja a una hora y siempre de camino a mi casa o a verle a él, normalmente durante el regreso, iba reflexionando sobre muchas cosas y me empezaron a surgir ideas. Siempre me surgen poemas porque yo como siempre digo soy la eterna voz en off, desde pequeña siempre tengo un monólogo interior. Cuando surgió lo de este libro, pensé que quería algo diferente. No quería una antología de poemas, buscaba un hilo conductor que atrajera, entonces pensé que siempre recorro así que Kilómetro 0 y eso me permite contar desde mi infancia hasta ahora.

—El poemario tiene un tono muy terapéutico, incluso para el lector.

—Totalmente. Yo me dedico a la educación. Siempre me gustó mucho el tema de la poesía desde pequeña, tiré por ahí y fui forjando esa personalidad tan… a ver cómo lo explico. Mira, yo me llamo a mi misma Cabeza de nube.

—Precisamente ahora le iba a preguntar por ese poema, ¿por qué se llama así?

—Siempre tengo demasiados pensamientos y me cuesta ordenarlos y eso me pasa también en la vida, si no tengo los pensamientos ordenados tampoco puedo ordenar mi vida. Entonces escribir me ayuda muchísimo a regularme emocionalmente, cojo las ideas que me vienen y, a partir de ahí, les doy forma volviendo a lo que yo siento, lo convierto en poema. Es algo peculiar porque cuando estoy muy triste, agobiada o frustrada lo que me pasa es que no me sale nada y necesito reflexionarlo yo un poco y luego ya sí, soy capaz de hacer un poema.

—¿Le asustaba crecer?

—Siempre fui una mente supercreativa, los problemas que tenía los escribía y eso me ayudaba un montón. Además era bastante retraída, no me gustaba mucho hablar en general pero cuando creces dices tengo que salir de aquí, abrirme al mundo y pelear. A mí me pasaba mucho eso, tenía vergüenza por muchas cosas, era insegura, no me atrevía a expresar lo que sentía…

—¿Su escritura es su forma de pelear?

—Es mi forma de pelear más que contra el mundo contra mí misma porque creo que el peor enemigo es uno mismo. Quizá antes veía el mundo como una amenaza, a día de hoy la reflexión a la que llego es que el mundo te da muchas posibilidades. Es cierto que pensamos que te las quita pero quien te las quita eres tú mismo, el mundo te las da y tus pensamientos y miedos te las quitan.

—¿Le gusta releer lo que escribe?

—Sí, porque veo los cambios en mí misma, cómo crezco, cómo maduro...

—¿Cómo es su relación con sus lectores?

—Me encanta ser cercana, sobre todo ahora que me he aceptado. Lo que no te gusta del resto es porque no te gusta de ti y las cosas que admiras de otra persona es que seguramente las tengas dentro pero por miedo o inseguridad no eres capaz de sacarlas. Lo que no te gusta a ti lo proyectas en otro cuerpo y eso me pasaba. Por eso, con los lectores soy muy cercana.