Cómicos aragoneses, desde 2017 colaboran juntos como dúo es sus espectáculos, ahora presentan ‘J & D: rechace imitaciones’ en el Teatro del Mercado. Volver al escenario es para ellos ‘terapéutico’, como también lo es reirse en tiempos de pandemia.

La pandemia ha sacado a relucir la importancia de los cómicos ¿lo ha hecho también al contrario, el valor del público para los humoristas?

Joako Malavirgen: Que la gente esté con mascarillas hace que lleguen menos risas y se nota menos respuesta, pero no significa que no la haya. Yo echo en falta la sonrisa del público para ver cómo responden. Luego cuando acaba el espectáculo nos dejan claro que se lo han pasado muy bien

Diego Peña:_Hay menos risas pero más aplausos, es curioso porque es la manera que tiene el público de demostrar que se les está gustando.

Hacen humor actualidad, además del inevitable covid ¿de que otros temas se ríen?

J. M.: El covid nos pilló en mitad del proceso del guion y se ha colado, como lo ha hecho en nuestras vidas. Pero también hemos querido, como este año no hay fiestas, que la gente tuviera sus propias fiestas dentro del teatro.

D. P.: Además, hay actualidad del mundo político, básicamente de todos esos cómicos que han salido usurpando nuestro lugar y nos han hecho la competencia, ahora nosotros nos hemos vengado un poco.

¿Se han puesto límites en este espectáculo?

J. M.: Creo que eso nos lleva pasando mucho tiempo, no solo con el covid. Ahí entra la profesionalidad de cada cómico y su sentido común.

D. P.: La clave de la comedia es buscar la sorpresa, hablamos de muchos temas pero intentamos darles la vuelta. Por ejemplo, con la distancia de seguridad, se habla de lo que nos gustaría abrazarnos pero no se habla de esa gente que dos metros son pocos, hay gente que nos gustaría tener a cuatro o cinco metros, que todos tenemos a alguien que huele fuerte.

¿Ha cambiado su forma de hacer humor desde que comenzaron a trabajar juntos hasta ahora?

D. P.: Todo es una evolución, entendemos la profesión de la misma manera, de crecimiento y de no dejar de formarnos en ningún momento.

J. M.: Antes cada uno traía sus sketches y ahora escribimos todo juntos, en vez de sumar multiplicamos. Nos ayudamos el uno al otro a potenciar su lado más fuerte. Hemos pasado de ser dos cómicos que se juntan a formar un dúo cómico.

Comentaban que volver a los escenarios era terapéutico, hasta el momento ¿a quién le está sirviendo más, al público o a ustedes?

J. M.: Con los nervios del estreno decía:_me tengo que tomar un valium. Pero a partir de ahora, que sabemos que todo funciona, yo voy a disfrutar como un crío pequeño. Ver los mensajes que te deja la gente felicitándote, a mi eso me da la vida y a la gente también.

D. P.: Es terapéutico para los dos.

Son un clásico de estas fechas, al ser de los pocos espectáculos que se mantienen ¿le añadía responsabilidad?

J. M.: Dentro del año tan malo me llena de orgullo ver que los teatros están llenos de compañías aragonesas, Jorge Asín y Marisol Aznar en el Teatro de las Esquinas, Teatro Indigesto, que nos ha dado el relevo… Muchos de nosotros hemos empezado en bares sin pensar en actuar en teatros y ver la cartelera con todos es muy bonito.

D. P.: Tiene responsabilidad, pero por estar a la altura del resto.