El Ayuntamiento de Calatayud, a través de su departamento de Bienestar Social, pondrá en marcha este verano un nuevo servicio de comedor escolar para niños de familias con especiales dificultades. El consistorio se une a la iniciativa presentada por el Gobierno de Aragón y varios ayuntamientos de la Comunidad Autónoma. Durante el mes de junio, el área de Bienestar Social ha concedido 60 ayudas económicas para que familias sin recursos puedan continuar utilizando los comedores escolares. "Desde el centro de Servicios Sociales existe un control absoluto de la situación de los menores y cuando hemos detectado que hay una necesidad nos hemos puesto manos a la obra para solucionarla", explicó Esther Herrero, concejal de Bienestar Social. Una vez acabado el curso escolar y durante julio y agosto, el comedor social del ayuntamiento dará comidas para estos niños. Se organizarán dos turnos para que los escolares no coincidan con los actuales usuarios del servicio. De nuevo, serán los Servicios Sociales quienes evaluarán cada caso y decidirán quienes tendrán acceso a este comedor.